De acuerdo con la civilización védica, las
muchachas solteras de diez a catorce años de edad deben adorar al Señor Śiva o
a la diosa Durgā a fin de obtener un buen marido; pero las muchachas solteras
de Vṛndāvana estaban ya atraídas por la belleza de Kṛṣṇa. Sin embargo, ellas se
ocuparon en la adoración de la diosa Durgā al principio de la estación hemanta (justamente antes de la estación
del invierno). El primer mes de hemanta
se llama Agrahāyaṇa (octubre-noviembre), y en ese entonces, todas las gopīs solteras de Vṛndāvana comenzaron a
adorar a la diosa Durgā aceptando un voto. Ellas primero comieron havi yanna, un tipo de comida que se
prepara hirviendo juntos mung dhal y
arroz, sin ningún tipo de especias ni cúrcuma. Según el mandato védico, este tipo
de alimento se recomienda para purificar el cuerpo antes de que uno ejecute una
ceremonia ritual.
Todas las gopīs
solteras de Vṛndāvana solían adorar diariamente a la diosa Kātyāyanī temprano
por la mañana, después de bañarse en el río Yamunā. Kātyāyanī es otro nombre de
la diosa Durgā. A la diosa se le adora preparando un muñeco de arena mezclada
con tierra de la ribera del Yamunā. En las escrituras védicas se indica que la
Deidad puede hacerse de diversos tipos de elementos materiales; puede pintarse,
hacerse de metal, hacerse de joyas, hacerse de madera, tierra o piedra, o puede
concebirse dentro del corazón del adorador. El filósofo māyāvādī considera que todas estas formas de la Deidad son
imaginarias, pero en la literatura védica se les acepta como idénticas al Señor
Supremo o al respectivo semidiós. Las gopīs
solteras solían preparar la deidad de la diosa Durgā y adorarla con pasta de candana, guirnaldas, lámparas de
incienso y todo tipo de presentaciones, tales como frutas, granos y ramitas de
plantas. Después de la adoración, es costumbre orar pidiendo alguna bendición.
Las muchachas solteras solían rezarle con gran devoción a la diosa Kātyāyanī,
dirigiéndose a ella de la siguiente manera: “¡Oh, suprema y eterna energía de
la Personalidad de Dios!, ¡Oh, supremo poder místico!, ¡Oh, controladora
suprema de este mundo material!, ¡Oh, diosa!, por favor, se bondadosa con
nosotras y dispón nuestro matrimonio con el hijo de Nanda Mahārāja, Kṛṣṇa. Los vaiṣṇavas generalmente no adoran a
ningún semidiós. A aquél que quiera avanzar en el servicio devocional puro, Śrīla
Narottama dāsa Ṭhākura le ha prohibido estrictamente toda adoración a los
semidioses. Aun así, las gopīs,
quienes están más allá de toda comparación en su afecto por Kṛṣṇa, fueron
vistas adorando a Durgā. Los adoradores de los semidioses mencionan algunas
veces que la gopīs también adoraban a
la diosa Durgā. Pero debemos comprender el propósito de las gopīs. Generalmente, la gente adora a la
diosa Durga para conseguir alguna bendición material. Aquí, las gopīs le oraban a la diosa para
convertirse en esposas del Señor Kṛṣṇa. El significado de esto es que si Kṛṣṇa
es el centro de toda actividad, un devoto puede adoptar cualquier medio para
alcanzar esa meta. Las gopīs podían
adoptar cualquier medio para satisfacer o servir a Kṛṣṇa. Ésta era la muy
excelente característica de las gopīs.
Ellas adoraron a la diosa Durgā por todo un mes, a fin de tener a Kṛṣṇa como
esposo. Cada día, ellas oraban para que Kṛṣṇa, el hijo de Nanda Mahārāja, se
convirtiera en su esposo.
‘El robo de la ropa de las gopīs solteras’ Del libro: “Kṛṣṇa la
Suprema Personalidad de Dios”.
Tomado de las recopilaciones hechas por S.G. Sādhyā-sresta Prabhu (ACBSP)
Sitio Web de SG. Sādhyā-sresta Prabhu: www.sadhyavastu.tk