Deseamos comenzar este pequeño libro acerca de Tulasī devī volviendo a
los devotos conscientes de cuanto Śrīla Prabhupāda se sentía feliz al saber que
algún devoto estaba cuidando a Tulasī con esmero y dedicación. Difícilmente vamos a encontrar el nombre de algún devoto o devota de
ISKCON escrito en las páginas del Śrīmad-Bhāgavatam, en los Significados Bhaktivedanta. No obstante, y tal vez sea la
única excepción, Śrīla Prabhupāda lo hizo cuando descubrió que una de sus
primeras discípulas, Govinda Dāsī, había tenido éxito en hacer brotar el primer
arbusto de Tulasī Devī. En el Canto Cuatro, Capítulo Ocho, verso cincuenta y
cinco, Śrīla Prabhupāda escribió:
Govinda dāsī entre las plantas de Tulasī en el templo Honolulu |
“En
este verso se menciona específicamente que las hojas de tulasī Le son muy queridas a la Suprema
Personalidad de Dios; los devotos deben procurar tener hojas de tulasī en todos los templos y centros de
adoración. Mientras nos ocupábamos en la propagación del movimiento para la
conciencia de Kṛṣṇa en Occidente, el hecho de no poder encontrar hojas de tulasī nos llenaba de insatisfacción. Debido
a ello, le estamos muy agradecidos a nuestra discípula Śrīmatī Govinda dāsī por
sus desvelos en plantar semillas de tulasī y
cuidar de su crecimiento. Por la gracia de Kṛṣṇa, en la actualidad tulasī crece en la práctica totalidad de los
centros de nuestro movimiento” [SB
4.8.55].
En la revista Back to Godhead
(De Vuelta al Supremo), Govinda Dāsī escribió un artículo en el año 1992, en
donde narra el encuentro de Śrīla Prabhupāda con la primera planta de Tulasī Devī.
Ella escribió lo siguiente:
“En 1969 Prabhupāda me envió a Honolulu para abrir un templo. Yo pasé
bastante tiempo leyendo en la biblioteca de pesquisas de la Universidad de Hawai. Encontré
muchos textos antiguos de la India, algunos escritos por el guru de Śrīla
Prabhupāda y otros santos vaiṣṇavas. Encontré informaciones sobre Tulasī
Devī, sus nombres botánicos, su historia y cómo cultivarla. Entonces, mi deseo
de cultivar Tulasī Devī se volvió una obsesión y de algún modo conseguí
semillas originarias de India. Las primeras semillas no germinaron. Yo adoraba
diariamente un brote verde bien fino, hasta que se volvió evidente que era
apenas una hoja de grama. La segunda remesa de semillas demostraron ser
fructíferas, y pequeñas plantas con forma de corazón abrieron sus delicadas
hojas en nuestra casa de Honolulu. Este era el comienzo.
Todavía yo no sabía por qué era importante para Śrīla Prabhupāda, o
para su misión, que cultivásemos Tulasī. Pero después, cuando en Los Ángeles le
mostré a Prabhupāda dos pequeñas Tulasīs, se quedó encantado. Por bastante
tiempo él sostuvo una de las macetas, observando vividamente extasiado la
pequeña Tulasī de quince centímetros, notando que ella era en realidad Śrīmati Tulasī
Devī.
Śrīla Prabhupāda habló sin cesar sobre las glorias de Tulasī Devī, y
estaba en un humor muy feliz. Kartikeya das, que era el sirviente de Śrīla
Prabhupāda, se sorprendió. Algunos momentos después me contó que no había visto
a Śrīla Prabhupāda tan feliz desde hacía más de un año”.
Śrīla Prabhupāda confirmó su felicidad poco tiempo después al
escribirle lo siguiente a Govinda Dāsī:
“Estoy muy feliz al saber que Śrīmati Tulasī Devī te ha favorecido
tanto... Yo estaba muy ansioso por introducir esta adoración de la planta de Tulasī
entre los miembros de nuestra sociedad, pero hasta ahora no había buenos
resultados. Por lo tanto, cuando al escuchar que obtuviste esta oportunidad, mi placer no tiene límites”.
Podemos entender cuánto Śrīla Prabhupāda apreció este servicio a Tulasī
Devī al leer la siguiente carta para esta devota:
“¿Cómo están tus plantas de Tulasī en Hawai? ¿Cómo se están sintiendo?
Yo estoy constantemente pensando
en ellas
y en tí. Por favor, hazme saber cómo están creciendo
y cómo las estás cuidando. Esta vez, cuando vaya a Hawai, me sentaré en el
bosquecito de arbustos de Tulasī y cantaré Hare Kṛṣṇa”.
Y cuando un vecino demoniaco atacó esas Tulasīs, Śrīla Prabhupāda
expresó sus sentimientos así:
“Estoy muy triste de oír que tu demoníaco vecino cortó muchas plantas
de Tulasī; sin embargo, no te preocupes. Puedes estar segura que, a su debido
tiempo, él tendrá su castigo apropiado... Deberíamos capturar esa persona y golpearla muy fuertemente con zapatos. Sin
embargo, no sería muy bueno para nuestra reputación que nos acusen de pelear de
esa manera. No obstante, si llegamos a descubrir que ese hombre está
transgrediendo nuestra propiedad, debemos castigarlo muy severamente”.
Śrīla Prabhupāda le escribió a Govinda Dāsī comentándole que él
siempre les contaba a muchos caballeros acerca de cómo ella había trabajado de
manera ardua para introducir Tulasī en los países occidentales y cómo ahora él
recibía informes de que ella crecía bellamente en todos lados. Estando así
satisfecho con Govinda Dāsī, Śrīla Prabhupāda le dijo que ella era realmente
una sirvienta de Govinda y deseó que ella alcanzase esa posición eterna en el
mundo espiritual. Śrīla Prabhupāda le escribió:
“Ojalá Tulasī sea bondadosa contigo y te
lleve ante Kṛṣṇa para que tú seas una de las Gopīs asistentes, las siervas en Vṛndāvana”.
Fue así cómo Śrīla Prabhupāda satisfizo su profundo deseo de ver Tulasī
Devī siendo adorada por los devotos de ISKCON. Al principio, estaba ansioso,
pero al ver que Tulasī había crecido en todos los templos, Prabhupāda expresó
su satisfacción, escribiéndole a los devotos que la cuidaban. Tal como un
padre, Śrīla Prabhupāda había plantado la semilla de la devoción en los
corazones de sus seguidores y, como él lo indicó después en varias cartas, esta
devoción crecería por la protección, bondad y compasión de madre Tulasī.
Śrīla Prabhupāda escribió para los devotos frases tales como:
“En cuanto más te dediques al servicio de Tulasī de forma personal,
más comprenderás y gustarás de la conciencia de Kṛṣṇa”.
“Por favor, ofrécele todos los respetos y cuídala con mucho esmero. Śrīmati
Tulasī Devī se satisfará contigo, otorgándote el auspicioso favor del Señor”.
“Esfuérzate por continuar cuidándola de la mejor manera posible y
automáticamente avanzarás en la conciencia de Kṛṣṇa”.
“Por hacer crecer profusamente plantas de Tulasī, estás haciendo un
servicio muy bueno para nuestra sociedad”.
“Estoy muy feliz al oír que Tulasī está creciendo bien. Este es el
síntoma de un servicio devocional serio”.
“La presencia de Tulasī es la prueba de una genuina atmósfera
espiritual en ese lugar”.
“Si existe algún impedimento para cultivar Tulasī, es una indicación
de un servicio devocional defectuoso”.
Oyendo acerca de los sentimientos y dedicación de Śrīla Prabhupāda por
Tulasī Devī, podemos percibir qué tan gloriosa ella es. Escuchemos ahora acerca
de las glorias de Tulasī Devī a partir de la Escrituras y los Purāṇas.