Prabhupāda hablaba con un amigo hindú invitado, y el tema se centró en
la publicación de la revista Back to
Godhead [De vuelta al Supremo] en
varias lenguas. Prabhupāda decía que los hindúes podían leer muy bien una
revista inglesa. Pero el invitado de Prabhupāda dijo que sería mucho mejor si
se pudiera publicar en hindi, gujarati, marathi y bengalí.
—Eso no es posible —dijo Prabhupāda—. Eso lo tienen que hacer ustedes,
los hindúes. Nosotros no tenemos tiempo. Pero ustedes estarán muy ocupados con
los matrimonios de sus hijas y lo único que pueden hacer es dar consejos.
—¡¿Que yo me ocupo en eso?! —exclamó el hombre lleno de sorpresa.
—Sí, todos —dijo Prabhupāda—. Todos los hindúes están muy ocupados en
sus propios asuntos. Puede que vengan y den un consejo, pero eso es todo.
Consejos gratis. Nunca van a hacer nada personalmente.
El hombre protestó: —No, pero...
Pero Prabhupāda lo sabía muy bien. —No; eso es lo que ocurre —afirmó—.
Toda la experiencia que he tenido con los hindúes es que vienen, dan algún
consejo y se van para preparar la boda de su hija. No hay más.
—Bien —concedió el hombre intentando recuperar su terreno—, usted sabe
que hay varias clases de hindúes.
—Sí —dijo Prabhupāda—, pues esta clase es el 99 por ciento. Todos
ustedes dan consejos, pero nunca van a ponerlos en práctica. Eso es lo que
ocurre.
Grabación en cinta (26 diciembre 1976)
En diferentes ocasiones, Prabhupāda explicó cómo el imperio británico
había causado un gran daño a la cultura de la India. Una vez habló
del Home Bill, que despachó todo el oro de la India hacia Londres. Incluso los musulmanes
hacían sus gastos en el interior de la
India , pero los británicos se robaron toda su riqueza.
Después describió cómo los británicos enviaron trabajadores hindúes por todo el
mundo.
—Primero hicieron sus conquistas con soldados hindúes —dijo Prabhupāda—. Después, cuando hubo
que organizarlo todo, se valieron de culis hindúes, obreros hindúes. Y como
tenían hombres y dinero de India, expandieron su imperio. Yo estoy haciendo lo
mismo: dinero americano y hombres americanos.
Prabhupāda rió al pensarlo: —Verdaderamente soy un gran político.
—Home Bill —comparó un devoto.
—Sí —dijo Prabhupāda—. Pero yo no busco un beneficio particular. Yo lo
hago para todo el mundo.
Grabación en cinta (15 enero 1977)
No hay comentarios:
Publicar un comentario