09. El distorsionado sistema de castas

El sistema varṇāśrama-dharma, tal como se menciona en las Escrituras, tiene por objetivo obtener la gracia del Señor Viṣṇu. Esa es la única solución al problema del nacimiento y la muerte. El amenazado sistema varṇāśrama-dharma ha producido una forma distorsionada, comúnmente conocida como el sistema de castas. El sistema de castas hoy en día está siendo representado por los políticos, los soldados, los capitalistas y los trabajadores. Los políticos y los mejores cerebros de planificación de la raza humana han adoptado la posición de brāhmaṇas. Es cierto que el brāhmaṇa posee el mejor cerebro para solventar los problemas de la vida humana, pero los políticos sólo están utilizando la mejor parte de sus cerebros para llevar a cabo sus propios planes egoístas. Al eludir las instrucciones del Dios Supremo, lo único que consiguen es crear caos en la sociedad.

La fuerza militar es una falsa representación de los kṣatriyas, cuya labor debería ser proteger a la gente. No obstante, los líderes militares de cada país están chupando la sangre de las gentes recaudando unos impuestos altísimos e insoportables, en lugar de dar una protección eficaz.

Los capitalistas, que representan a los vaiśyas, en lugar de acumular riqueza para ejecutar la voluntad del Señor Viṣṇu, están amasando grandes riquezas para su propio disfrute sensual. Como resultado de ello, por todo el mundo surgen muchos problemas, como por ejemplo, estrategias políticas para explotar a las masas, etc. Los trabajadores son una representación distorsionada de los śūdras, que están sirviendo a los capitalistas bajo la presión de muchos compromisos. Ellos siempre están reivindicando soluciones al problema del trabajo mediante pactos políticos. El sistema varṇāśrama-dharma no ha sido condenado al ostracismo, como quizás algunos desearían, sino que está siendo representado de forma distorsionada por políticos en la posición de los brāhmaṇas, militares en la posición de los kṣatriyas, capitalistas en la posición de los vaiśyas, y trabajadores en la posición de los śūdras. El sistema se ha distorsionado por completo por la actitud que ha tomado la humanidad de querer romper las leyes. Eso está echando a perder la atmósfera de progreso pacífico en la vida humana. Actualmente, el sistema distorsionado de varṇāśrama-dharma no puede complacer de ningún modo al Dios Supremo Viṣṇu. Y como consecuencia nadie puede evadirse de la acción de policía de la madre Naturaleza, por muy experto que sea en la ciencia material.