Los devotos brillan como zafiro cuando pasan por el fuego del sādhana

Bhagavad-gītā 10.11

El alma es como una joya. Es una chispa refulgente de conciencia que forma parte de la suprema y refulgente realidad última, Kṛṣṇa. Sin embargo, en la actualidad está cubierta por diversas impurezas que oscurecen sus virtudes innatas.

Sadhana-bhakti o la devoción disciplinada es un proceso consagrado desde hace mucho tiempo para purificar el alma. La disciplina de la devoción se centra en fijar la conciencia en el todo atractivo Kṛṣṇa, saboreando así Su dulzura y comprendiendo la vacuidad de los placeres mundanos. Y el anhelo por esos placeres es la esencia de todas las impurezas.

Cuando comenzamos a practicar el bhakti, todos tenemos distintos grados de impurezas. Pero si perseveramos en la práctica del bhakti, ésta actúa como un fuego que quema las contaminaciones que se han adherido a nosotros durante mucho tiempo.

Practicar el bhakti a veces puede parecer como atravesar el fuego: es incómodo porque nos obliga a enfrentarnos a decisiones difíciles que preferiríamos posponer. Con frecuencia, dejamos que nuestra conciencia divague con nuestra mente mientras fantasea con diversos placeres mundanos. Pero cuando practicamos el bhakti como disciplina, tenemos que elegir entre dejar que la mente divague caprichosamente o centrarla en Kṛṣṇa, incluso cuando tal concentración no nos resulte agradable.

¿Por qué nos resulta desagradable ese enfoque divino? Porque nuestras impurezas bloquean nuestro acceso a la dulzura de Kṛṣṇa. Cuando comprendemos que el fuego de la sadhana quemará esas impurezas, no nos dejamos desanimar por la falta de sabor de nuestra devoción actual; en cambio, seguimos adelante con determinación.

Si nos consagramos así a Kṛṣṇa, Él nos purifica iluminando nuestro mundo interior con la antorcha del conocimiento (Bhagavad-gītā 10.11). Esta antorcha nos ayuda a ver que lo que se quema con el fuego de la sadhana es eminentemente prescindible y que lo que emerge después de esa hoguera es el alma pura, brillante como el zafiro, refulgente de amor y alegría eterna.

Piénsalo bien:

· ¿En qué se centra la devoción disciplinada?

· ¿Por qué practicar bhakti parece incómodo, como atravesar el fuego?

· ¿Qué revela la antorcha interior de la misericordia de Kṛṣṇa?

Para otorgarles una misericordia especial, Yo, morando en sus corazones, destruyo con la deslumbrante lámpara del conocimiento la oscuridad que nace de la ignorancia. – Bhagavad-gītā 10.11