No te dejes llevar por las cáscaras de plátano filosóficas de las paradojas escriturales


 Bhagavad-gītā 13.14-15

A algunos de nosotros nos pueden desanimar las afirmaciones aparentemente contradictorias del Bhagavad-gītā. Varias de esas afirmaciones se encuentran en el capítulo trece del Bhagavad-gītā, donde, por ejemplo, se dice que la Verdad Absoluta tiene manos en todas partes y también que no tiene manos en absoluto ( 13.14-13.15 ) .

Estas afirmaciones son como cáscaras de plátano filosóficas: si durante nuestro viaje espiritual no tenemos cuidado al tratar con ellas, tropezaremos, resbalaremos y caeremos.

Tratarlos con cuidado significa no reaccionar con burla o desdén, sino responder con humildad y madurez.

1.                  Humildad: La humildad nos protege de sucumbir a la tentación de burlarnos de tales afirmaciones. Nos permite detenernos y reflexionar: “Si bien muchas de las personas más sabias de la historia humana han encontrado una sabiduría profunda en el Bhagavad-gītā, tal vez yo esté confundiendo lo que es abstruso (incomprensible) con absurdo. Tal vez esté sobrestimando mi capacidad para captar el mensaje del Bhagavad-gītā”.

2.                  Madurez: La madurez nos dará la amplitud de miras para reconocer que existen perspectivas posibles y hasta valiosas que no sean las nuestras. La sabiduría del Bhagavad-gītā tiene como objetivo elevar nuestra conciencia a perspectivas más elevadas. Para impulsarnos hacia ese fin, a veces nos deja caer tentadoras perlas de sabiduría que se intuyen desde esas perspectivas más elevadas. Lo que desde nuestra perspectiva parece una contradicción flagrante, desde una perspectiva más elevada se ve como una brillante paradoja: una afirmación que implica contradicciones superficiales que estimula con fuerza a los oyentes a buscar una verdad unificadora más profunda. El Bhagavad-gītā utiliza paradojas en su capítulo trece para transmitir la realidad de que la Verdad Absoluta tiene una forma, pero una forma radicalmente diferente de la nuestra.

Por lo tanto, cuando nos encontramos con afirmaciones aparentemente incomprensibles en el Bhagavad-gītā, no debemos caer en esas cáscaras de plátano filosóficas, sino que podemos verlas como indicadores de las bananas nutritivas de las percepciones esotéricas que nos aguardan en el camino.

Por doquier están Sus manos y Sus piernas, y Sus ojos, Sus cabezas y Sus caras, y Él tiene oídos por todas partes. De ese modo existe la Superalma, omnipresente en todo. La Superalma es la fuente original de todos los sentidos, y, sin embargo, no tiene sentidos. Él es libre, aunque es el sustentador de todos los seres vivientes. Él trasciende las modalidades de la naturaleza, y al mismo tiempo es el amo de todas las modalidades de la naturaleza material. - Bhagavad-gītā 13.14 - Bhagavad-gītā 13.15

No hay comentarios:

Publicar un comentario