31. Gatito afectuoso



Śrīla Prabhupāda Uvāca 31
Abril de 1973, Los Angeles, California
Templo de Nueva Dvārakā

Toda vez que hay privacidad y el clima es agradable, Śrīla Prabhupāda toma su masaje afuera con la espalda hacia el sol de la mañana, sin importar el lugar. Muchas veces Su Divina Gracia dijo, “El sol de la mañana da energía y el sol de la tarde se la lleva”. Hoy es un hermoso día de sol y Śrīla Prabhupāda decidió tomar el masaje en “su sitio favorito”, el jardín. Luego de colocar la estera en el suelo, con el aceite de sándalo y de mostaza a su lado, Śrīla Prabhupāda se sentó con las piernas cruzadas.

Hoy sucedió algo fuera de lo común. Mientras daba el masaje a la espalda de Śrīla Prabhupāda, un gatito se cruzó por debajo de la puerta. Quizás el gatito quería tener algo de asociación con el devoto puro. Esa cosita pequeña y peluda comenzó a lamer la espalda de Śrīla Prabhupāda con afecto y a restregar su piel contra Su Divina Gracia. Para mi sorpresa, Śrīla Prabhupāda le permitió que lo hiciera por unos minutos.

Por último, Śrīla Prabhupāda dijo, “Eso es todo, llévenselo”. Aferré rápidamente al gato y lo puse sobre la cerca. Siendo muy pequeño y sumamente determinado a tener más asociación, el gatito de inmediato se arrastró por debajo de la puerta, una.....y otra vez.....y otra vez..... Entró tres veces y las tres veces lo arrojé por encima de la cerca.

Por último, busqué algunos bloques de carbón y los puse parapetados en la puerta. El gato ya no pudo cruzar, para obtener otro gusto de Su Divina Gracia. Aunque el gato estaba frustrado, lloraba sonoramente, maullando afuera del portón, todo el tiempo que duró el masaje de Śrīla Prabhupāda. Se lamentaba de su mala fortuna a gritos. Aprendí algo de ese gatito: yo debía estar así de ansioso por la asociación con el devoto puro.

Tan solo vean como un momento de asociación con el devoto puro, puede cambiar la vida de hasta un pequeño animal. El gato debió sentirse atraído por la naturaleza trascendental de Śrīla Prabhupāda. El quería bañarse en el néctar de Prabhupāda, sin importar qué obstáculos se le colocaban por delante. Oro porque algún día yo esté tan determinado como ese gatito, a asociarme con mi Guru Mahārāja en el servicio amoroso. 

1 comentario:

  1. ¡Hermosas historias!,¡gracias por compartirlas!.MMVD

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