Rūpa Gosvāmī
Kumardeva y Revatīdevī
tuvieron una hija y cinco hijos. (1) De estos hijos. Sanātana, Rūpa (1489-1564)
y Ballabha fueron conocidos como devotos puros. Su linaje sarasvatī-brāhmaṇa era oriundo de Karnakata, en el Sur de la India,
pero Kumardeva se mudó a Baklacandravip (la moderna Barisal), cerca de Rāmasari,
en el distrito de Jessore, Bengala Oriental. Es aquí donde los tres piadosos
muchachos fueron criados. Los eruditos afirman que Rūpa y Sanātana eran
conocidos en aquellos días como Amara y Santos, (2) respectivamente. Los
nombres “Rūpa” y “Sanātana” les fueron dados mucho después por Śrī Caitanya.
Cuando se encontraron por
primera vez con el Señor, Rūpa y Sanātana estaban trabajando para el gobierno
musulmán de ocupación de Bengala bajo las órdenes del nawab Hussein Shah, el
entonces emperador de Gauḍa. (3) En esa época, recibieron los títulos persas de
Dabir Khas (“secretario privado”) y Sakara Malik (“oficial de rentas”), (4) y
gozaban de gran riqueza y prestigio como líderes políticos en un régimen en
crecimiento.
No obstante, eran estudiantes
ávidos de las escrituras y nunca olvidaban los pies de loto del Señor. Aun
antes de encontrarse con Śrī Caitanya, gozaban de renombre en toda la India por su gran erudición
y su intensa devoción. (6) Rūpa ya había escrito varios libros sobre filosofía
védica, inclusive su hoy famoso Haṁsadūta, y Sanātana solía recitar
regularmente el Śrīmad-Bhāgavatam, con
lágrimas de éxtasis, para todo el que quisiera escuchar. Así, pues, surge una
pregunta obvia: ¿Por qué querrían estos dos hermanos inclinados espiritualmente,
invertir aun una fracción de su valioso tiempo en una carrera política mundana?
Según el bhakti-rainakara, ellos fueron reclutados para sus deberes
gubernamentales por el Nawab Hussein Shah, quien los amenazó con la expulsión
física y la muerte de devotos piadosos. (7) El se había enterado de cuán amados
por la gente común eran Rūpa y Sanātana, y que eran conocidos como rāja-sihsta (“los reyes de la erudición”)
(8) por su pericia en el conocimiento de las escrituras. “Si pudiera obligarlos
a entrar a mi servicio”, razonaba el Nawab, “podría conquistar con más éxito el
apoyo de la gente en general.
Debe entenderse, sin embargo, que
su temor no estaba motivado por el egoísmo.
El Bhakti-ratnākara afirma claramente que estaban más preocupados por
la amenaza del Nawab de causar daño a la sociedad de vaiṣṇavas. Si desobedecían, las repercusiones serían horrendas. En
consecuencia, aceptaron el servicio de Hussein Shah. El Nawab, encantado con
esta conquista, otorgó grandes riquezas a los dos hermanos a medida que
desempeñaban solícitamente su servicio.
Kumardeva, su padre, rezaba
por ellos, pero en lo profundo de su ser sabía que ellos eran grandes devotos y
que Kṛṣṇa debía de tener algún plan. Dabir Khas y Sakara Malik sentían
inquietud con respecto a sus nuevas ocupaciones, y sostuvieron correspondencia
con Śrī Caitanya, con la esperanza de que les concediera Su asociación algún
día, y de que tal vez pudiera resolverles su dilema.
Resignándose temporalmente a
su destino, se establecieron en Rāmakeli, una aldea situada unas dieciocho
millas al sudeste de Malda (en el distrito de Rajasani, en Bengala
septentrional). Allí usaron su gran riqueza para construir una réplica de la
morada de Śrī Kṛṣṇa -una “Vṛndāvana Oculta” (gupta)-, complementada con
primorosos balnearios y constantes lecturas sobre los pasatiempos del Señor. (11)
De esta manera, procuraban aliviar su “sentencia” de empleo gubernamental.
A medida que estudiaban y
transmitían las escrituras a sus colegas musulmanes, los dos hermanos se
volvieron expertos en sánscrito, árabe, persa, así como en otros dialectos
locales. Se dice que estudiaron sánscrito bajo la guía del renombrado Sarvānanda
Vidyā-Vācaspati (el hermano de Sārvabhauma Bhaṭṭācārya) (12) y que su
conocimiento del árabe y del persa lo adquirieron con la ayuda de Syed
Fakir-un-Din, un reputado erudito y terrateniente de Saptagram. (13) De esta
manera, pasaban su tiempo en Rāmakeli, mientras externamente (pero también
competentemente) desempeñaban los deberes de estado.
Cierta vez, cuando Śrī
Caitanya decidió ir a Vṛndāvana (en 1514), se detuvo en Rāmakeli
específicamente para encontrarse con Dabir Khas y Sakara Malik, Para ese
entonces, Él iba acompañado por miles de seguidores, todos los cuales estaban
cantando y bailando con Él. Al oír que había llegado, los dos hermanos hicieron
planes para verlo. Siendo como eran, funcionarios musulmanes, decidieron acudir
en plena noche a fin de no ser observados. (14)
Atravesando la multitud de
dedicados devotos, se encontraron primero con Nityānanda Prabhu y Haridāsa Ṭhākura,
quienes de inmediato hicieron conocer su llegada a Śrī Caitanya. El Señor se
llenó de júbilo cuando vio a Sus dos asociados eternos, y ellos, a su vez, se
llenaron de júbilo al verlo a Él.
Como símbolo de su humildad, ambos
hermanos tomaron manojos de paja y se los pusieron entre los dientes. Cayendo
ante los pies de loto de Śrī Caitanya, lloraron con dicha ilimitada. Finalmente
estaban reunidos con su Señor y salvador, y sabían que Él pondría ahora fin a
su aprieto con Hussein Shah.
Levantándose del suelo. Dabir
Khas y Sakara Malik (su hermano menor, Ballabha, estaba también allí)
ofrecieron sinceras oraciones a Śrī Caitanya: “¡Todas las glorias a Śrī Kṛṣṇa
Caitanya Mahāprabhu! Tú eres el muy misericordioso salvador de las almas caídas.
¡Todas las glorias a Tu suprema personalidad!
“Nosotros pertenecemos a la
clase más baja de hombres”, continuaron, “y nuestros asociados y empleo son del
tipo más bajo. Por lo tanto, nos resulta extraño presentarnos a Ti. Como Tú
eres tan puro, nos sentimos avergonzados. Querido Señor, permítenos asegurarte
que nadie es más pecaminoso que nosotros, ni existe Señor, ofensor alguno como
nosotros. Puesto que te has encarnado específicamente para liberar a las almas
caídas, por favor considera que no hay ninguna tan caída como nosotros dos, pues
somos peores que Jagāi y Mādhāi”. De esta manera, los dos hermanos se
presentaron humildemente ante Śrī Caitanya.
Cuando se compararon a Jagāi y
Mādhāi, dos de los más pecaminosos receptores de la misericordia del Señor, Śrī
Caitanya les habló: “Ustedes dos son Mis sirvientes eternos. Desde este día, sus
nombres serán cambiados a Śrī Rūpa y Śrī Sanātana. Ahora, por favor, abandonen
su humildad, pues el corazón se Me está partiendo de verlos tan humildes. “Śrī
Caitanya inició así a Sus dos más grandes seguidores en el gauḍīyā vaiṣṇavismo.
Él continuó: “Ustedes han
escrito varias cartas que demuestran su humildad. Por esas cartas puedo
comprender su verdadero grado de avance espiritual. Dicho sea de paso, Yo, en
realidad, no tenía nada que hacer en Rāmakeli, he venido aquí específicamente
por ustedes dos”. Asegurando a Rūpa y Sanātana que su ocupación mundana en el
gobierno de Hussein Shan terminaría pronto, Él les aconsejó que se fueran a
casa y que no se preocuparan por su futuro. Ahora que se habían rendido, su
futuro estaba en manos de Kṛṣṇa.
“Nacimiento tras nacimiento”, les
dijo Śrī Caitanya, “ustedes han sido Mis sirvientes eternos. Estoy seguro de
que Kṛṣṇa los liberará muy pronto”. (16) El Señor les puso entonces Sus dos
manos sobre la cabeza. Sintiéndose avergonzados por este ademán, ellos se
inclinaron ante Él y pusieron los pies de Él, no Sus manos, sobre sus cabezas. Después
de esto, Śrī Caitanya los abrazó y pidió a todos los devotos que derramaran sus
bendiciones sobre ellos.
Antes de marcharse, los dos
hermanos expresaron inquietud por el hecho de que Śrī Caitanya continuara en el
camino a Vṛndāvana. Ellos le advirtieron que Hussein Shah, aunque respetuoso, estaba
preocupado por su propia carrera política y podría causar daño a un poderoso
predicador religioso como Śrī Caitanya, en especial si descubría que sus dos
mejores hombres dejarían pronto su servicio en favor de este predicador.
Al ver que este argumento no
detenía a Śrī Caitanya, ellos le recordaron que era impropio en la etiqueta de
un sannyāsī el viajar a Vṛndāvana con
su gran séquito.
Esta consideración final fue
suficiente para disuadirlo, y Śrī Caitanya pronto regresó a Purī. Por cierto, después
de varios meses, el Señor intentó nuevamente ir a Vṛndāvana y llegó allí sin
incidente alguno.
Śrī Rūpa Gosvāmī y su hermano
menor, Ballabha (a quien Śrī Caitanya llamó “Anupama”), pudieron esta vez
renunciar al mundo y vivir como mendicantes viajeros.
Sanātana Gosvāmī, por otro
lado, estaba aún atado por compromisos previos dentro de la administración del
Nawab. Él, por lo tanto, no pudo dejar su cargo oficial al mismo tiempo que sus
hermanos.
Viajando a Prayag (la actual
Allahabad), Rūpa y Anupama se volvieron a encontrar con Śrī Caitanya, ya que
estaban propagando Su mensaje en ese distrito, y Él estaba regresando a Purī
después Su exitosa peregrinación a Vṛndāvana.
Aprovechando el auspicioso
encuentro, por espacio de diez días instruyó a los dos hermanos con respecto a kṛṣṇa-tattva, la verdad última acerca de
Śrī Kṛṣṇa; bhakti-tattva, la verdad
acerca de la devoción a Kṛṣṇa; y rasa-tattva,
la verdad sobre las trascendentales relaciones amorosas con Kṛṣṇa.
Mientras se aproximaban a Śrī
Caitanya, una vez más con muchísima humildad, ellos ofrecieron una oración
memorable:
namo
mahā-vadānyāya
kṛṣṇa-prema
pradāya te
kṛṣṇāya-kṛṣṇa-caitanya
nāmne
gaura-tviṣe namāḥ
“¡Oh muy misericordiosa encarnación del Señor! Tú eres Kṛṣṇa Mismo
apareciendo como Śrī Caitanya. Tú has asumido el color dorado de Rādhārāṇī, y
estás distribuyendo libremente lo que ninguna otra encarnación ha distribuido
nunca: amor puro por Dios”.
Sintiéndose complacido con esta oración, Śrī Caitanya comenzó a
instruir a Rūpa y Anupama: “El océano de relaciones espirituales en lo
referente al servicio devocional es tan grande, que es imposible describirlo
por completo. Nadie puede calcular el largo y ancho de ese océano. Mas, tan
sólo para ayudarlos a apreciar sus incalculables dimensiones, compartiré con
ustedes una gota”. Procedió entonces a describir la naturaleza del alma con
riguroso detalle, sustentando Sus declaraciones con referencias a la literatura
védica.
Śrī Caitanya explicó que, “la medida del alma espiritual es muy, muy
diminuta: su medida es la diezmilésima parte de la punta de un cabello. Estas
infinitesimales entidades vivientes existen en número ilimitado, y son de dos
tipos: móviles e inmóviles. Las entidades móviles se dividen en especies
humanas y no humanas, y las especies humanas se subdividen en culturas
civilizadas y no civilizadas. Aquellos que siguen principios espirituales, en
particular los que están enunciados en la cultura védica, se cuentan como
civilizados. Y, entre éstos, hay muchos que son meramente practicantes
superficiales”.
“Entre los seguidores serios de una cultura espiritual, la mayoría
están, en el mejor de los casos, interesados principalmente en la salvación
personal (si es que no se interesan en búsquedas francamente materialistas que
están meramente endulzadas con sabor espiritual)”. “De éstos”, señaló Śrī
Caitanya, “en verdad es rara la persona ha progresado lo suficiente como para
indagar sinceramente sobre la meta última de la vida (y buscarla). De muchos
millones de tales individuos espiritualmente maduros, puede que uno logre
realmente la salvación genuina. Y de millones de estas almas especialmente
afortunadas, muy pocas alcanzan alguna vez el nivel de la devoción pura”.
Śrī Caitanya decidió precisar este punto: “a medida que los ilimitados
seres vivientes deambulan por los múltiples universos materiales, vida tras
vida en diferentes especies, se empeñan en una incesante búsqueda de paz y
felicidad. A veces disfrutan de placeres celestiales, y a veces padecen
sufrimientos infernales. No obstante, si un alma se vuelve uno de los pocos
afortunados, obteniendo la oportunidad de asociarse con un maestro espiritual
fidedigno (un devoto puro de la sucesión discipular), en ese momento recibe el
codiciado bhakti-latā-bīja, o semilla del servicio devocional (la cual arraiga
entonces firmemente en su corazón)”.
Rūpa y Sanātana estaban saboreando estas explicaciones, de modo que el
Señor las precisó aun más: “Una persona así de afortunada”, dijo Śrī Caitanya, “debe
atender cuidadosamente la semilla de la devoción como un jardinero competente. Debe
regarla asiduamente mediante el proceso de oír y cantar acerca de las glorias
de Kṛṣṇa. Gradualmente, la semilla brota y la enredadera del servicio
devocional crece y crece, perforando las paredes de nuestro universo
condicionado, llevando a esa persona hasta el mundo espiritual.
Cuando el alma que personifica la enredadera de la devoción arriba
finalmente a Goloka Vṛndāvana, la morada suprema de Śrī Kṛṣṇa, produce cantidades
abundantes de prema-phala, los frutos
del amor divino. Estos dones eternos soportan toda la manifestación cósmica y
son los únicos bienes que dan verdadero, placer, tanto para la entidad viviente
como para la
Suprema Personalidad de Dios”.
Rūpa y Sanātana fueron advertidos a continuación de que “el candidato
al servicio devocional puro, mientras esté cultivando la enredadera de la
devoción, debe tener cuidado de no cometer ofensas contra los vaiṣṇavas. Semejantes ofensas se
asemejan a un elefante enloquecido que arranca de raíz la enredadera devocional,
haciendo que ésta se sofoque y muera. El jardinero espiritual debe aprender a
proteger su enredadera devocional de la ofensa del elefante enloquecido”.
Śrī Caitanya precisó otro posible peligro en la senda de la devoción: “Al
lado de la enredadera devocional, pueden crecer las malas hierbas, y el
jardinero debe tener cuidado de no nutrirlas al regar su enredadera devocional”.
A medida que Rūpa Gosvāmī y Anupama escuchaban esta analogía de la “enredadera
devocional”, florecía su comprensión espiritual.
Śrī Caitanya usó asimismo la analogía del “azúcar”para explicar
adicionalmente los niveles progresivos de prema,
el amor puro por Dios. Primero viene la semilla de la caña de azúcar, y luego
la planta de la caña. De la planta, se puede extraer el dulce jugo de la caña
de azúcar. Cuando se hace hervir este jugo, se vuelve melaza líquida y, cuando
se cuece más, se vuelve melaza sólida. Esta melaza se convierte luego en azúcar
y, finalmente, en azúcar cande. De este modo, el azúcar se desarrolla
gradualmente desde un estado crudo hasta uno refinado. De manera similar, el
amor por Dios evoluciona a través de estados cuidadosamente descritos, cada uno
más concentrado que el anterior.
Pormenorizando científicamente todas estas etapas, usando una compleja
terminología sánscrita, Śrī Caitanya explicó a continuación a los dos hermanos
cómo el amor puro culmina en la autorrealización y cómo empieza uno a
restablecerse en su relación original con Kṛṣṇa. Estas relaciones (rasa-tattva) existen en cinco formas
principales: śānta-rati, apreciación
neutral del Señor, dāsya-rati, apego
en servidumbre; sakhya-rati, apego en
amistad; vātsalya-rati, apego en
afecto paterno; y mādhurya-rati, apego
en amor conyugal. Esta teoría de los rasas
fue posteriormente sistematizada por Rūpa Gosvāmī en el Bhakti-rasāmṛta-sindhu y desarrollada aun más en el Ujjvala-nīlamaṇi.
A continuación, Śrī Caitanya les explicó a Rūpa y Anupama que el apego
a Kṛṣṇa es bien en temor reverencial, o bien en amor puro y espontáneo. Esta
discusión fue similar en contenido a Sus conversaciones con Vyeṅkaṭa Bhaṭṭa, el
padre de Gopāla Bhaṭṭa Gosvāmī. El apego en temor reverencial, dijo Él, se
encuentra en todos los planetas espirituales a lo largo y ancho del Reino de
Dios.
Sin embargo, hay una excepción, y Śrī Caitanya se apresuró a señalarla.
Esa excepción es Goloka Vṛndāvana, el planeta espiritual más elevado. En otros
niveles espirituales, las opulencias del Señor son prominentes, y predomina el
servicio devocional en neutralidad y servidumbre. Pero en Goloka Vṛndāvana las
relaciones prominentes con Śrī Kṛṣṇa son la fraternal, la paternal y la
conyugal, relaciones íntimas que son en realidad estorbadas por los
sentimientos de temor reverencial. Los devotos de Goloka Vṛndāvana experimentan
la ilimitada opulencia del Señor, pero no están atemorizados por ella, porque
ellos ponen énfasis en una relación natural, espontánea y amorosa con Kṛṣṇa.
Cada etapa de amor se caracteriza por tener todas las cualidades de
las etapas precedentes más un incremento en sentimientos de intimidad con el
Señor. La servidumbre, por ejemplo, incluye la neutralidad, y el apego
fraternal incluye elementos tanto de neutralidad, sin embargo, la fraternidad
está generalmente desprovista de formalidad y veneración, al menos en los
niveles más íntimos. Lo mismo vale para el amor paternal y conyugal. Los
devotos situados en el apego de amor paternal, además de tener sentimientos de
neutralidad, servidumbre y amistad, puede que también se consideren
mantenedores del Señor. Esto tiene un gusto excepcionalmente dulce para Kṛṣṇa
ya que Él le permite a Su devoto que adopte una posición extremadamente
responsable. En este punto, Él confía en ellos en forma ilimitada, y se coloca
sin reservas bajo su cuidado.
Las cuatro relaciones mencionadas culminan sin excepción en la
relación de amor conyugal. Aquí, el fundamental apego por Kṛṣṇa, el servicio a
Él, los sentimientos íntimos de fraternidad y la madura concepción de
mantenerlo a Él aumentan todos en intensidad. Sin embargo, debe advertirse al
lector que el “amor” en discusión no es del tipo al que estamos acostumbrados
en el mundo del nacimiento y la muerte. El amor espiritual descrito por Śrī
Caitanya está desprovisto de carnalidad, superficialidad e impermanencia, cualidades
características del “amor” en la esfera material. En contraste, el rasa conyugal es completamente
espiritual, extremadamente profundo y es eterno. Este nivel de amor divino es
tan exaltado, que Śrī Caitanya les dijo a Rūpa y Anupama que no puede ser
descrito a cabalidad. No obstante, los tres disfrutaron de un gran éxtasis
espiritual al aludir a este tema, y, posteriormente, Śrī Rūpa recibió el título
de “rasācārya” en reconocimiento a su
pericia en el área de la teología de los rasas.
Śrī Caitanya concluyó así Sus instrucciones a Rūpa y Anupama diciendo:
“Les he dado, simplemente, un repaso general de las verdades del servicio
devocional. Ustedes pueden considerar la manera de ajustarlo y explicarlo más
elaboradamente. Cuando se piensa constantemente en Kṛṣṇa, el amor por Él se
manifiesta dentro del corazón. Aun cuando uno sea ignorante, por la
misericordia de Śrī Kṛṣṇa y de Sus representantes apoderados, uno puede
alcanzar la orilla del océano de amor espiritual”. (17)
Después de estos diez días juntos, Rūpa y Anupama no querían alejarse
del lado del Señor. Lo acompañaron hasta Benares, y le suplicaron proseguir
hasta Purī. Pero Śrī Caitanya les pidió que visitaran primero Vṛndāvana y que
más adelante se encontraran con El en Purī, después de atravesar Bengala. Obedeciendo
el pedido de su Señor, los dos hermanos fueron a Vṛndāvana y, después de una
corta estadía, decidieron que era hora de encontrarse con El en Purī. En el
camino, Anupama dejó este mundo.
Fue mientras viajaban a Purī que Rūpa Gosvāmī concibió por vez primera
el escribir obras dramáticas como un medio factible de transmitir los
pasatiempos de Kṛṣṇa. Preparando un bosquejo básico para tales obras, escribió
el borrador de un drama sobre las actividades de Kṛṣṇa como pastorcito de vacas
en Vṛndāvana y como rey en Dvārakā. Poco después de comenzar esta obra, Rūpa
llegó a una aldea conocida como Satiabhamapura (en Orisa). Esa noche, tuvo un
sueño en el que una hermosa mujer se le aparecía y le pedía que escribiese una
obra, aparte, sobre ella. A la mañana siguiente, comprendió que se trataba de
la reina de Kṛṣṇa, Satyabhāmā, quien le pedía que escribiera dos obras
separadas sobre los pasatiempos del Señor en Vṛndāvana y en Dvārakā.
Cuando Rūpa Gosvāmī llegó finalmente a Purī, le mostró el bosquejo de
sus dos dramas a Śrī Caitanya, quien le confirmó que hay una gran diferencia
entre los pasatiempos de Kṛṣṇa en Vṛndāvana y aquellos en Dvārakā, y que es
apropiado describirlos en dos obras diferentes. Los pasatiempos de Vṛndāvana
exhiben le aspecto mādhurya, íntimo, del
Señor, mientras que los majestuosos pasatiempos de Dvārakā son característicos
de Su aspecto aiśvarya. El hecho de
combinarlos constituiría una inapropiada mezcla de rasas.
El Caitanya-caritāmṛta
describe el gran deleite de Śrī Caitanya y de Rāmānanda Rāya al leer los
primeros borradores de la obra de Rūpa Gosvāmī. Pero aquí debe mencionarse que
los libros no fueron terminados hasta años después. Los pasatiempos de Vṛndāvana
fueron completados en 1532, y titulados el Vidagdha-mādhava.
(18) El episodio de Dvārakā de la vida de Kṛṣṇa fue completado en 1546 y
titulado el Lalitā-mādhava. (19)
Estas dos obras son consideradas hoy por los gauḍīyā vaiṣṇavas como las más importantes literaturas dramáticas
existentes en idioma sánscrito.
Antes de describir con todo detalle la obra de Rūpa Gosvāmī, es
significativo observar que permaneció con Śrī Caitanya por espacio de nueve
meses en Purī y que recibió de Él instrucciones adicionales sobre la ciencia de
la conciencia de Kṛṣṇa. (20)
Luego, tras oír de labios de Śrī Caitanya que debía ir a la tierra
sagrada de Vṛndāvana para desenterrar los sagrados lugares ocultos, establecer
templos prominentes y escribir libros sobre la filosofía que Él le había
enseñado, Śrī Rūpa partió para cumplir la misión de Śrī Caitanya Mahāprabhu.
Al pasar por Bengala, se demoró durante doce meses completos. (21)
Sintiendo que su renuncia al mundo podía ocasionar inconvenientes a sus
familiares y parientes, Śrī Rūpa decidió dividir sus riquezas entre ellos para
darles así una sensación de seguridad. Adicionalmente, donó grandes sumas a la
comunidad brahmínica y a los templos de Bengala. Los trámites deben de haber
tomado tiempo, porque no fue hasta un año más tarde que llegó a Vṛndāvana.
Aunque ha sido tema de controversia, se ha asegurado que, poco después
de llegar, Śrī Rūpa Gosvāmī estableció una Deidad de Vṛndādevī, una diosa que “no
sólo llevaba el nombre de la ciudad, sino que era también considerada como un
aspecto encarnado de Kṛṣṇa”. (22) De hecho, a Vṛndādevī se la conoce como la
propietaria de Vṛndāvana y es una encarnación de una gopī de la categoría sakhī,
una sirvienta muy íntima de Kṛṣṇa. El historiador F. S. Growse afirma que la Deidad estaba originalmente
ubicada en la actual Sevā-kuṅjā, cerca del centro de la ciudad. (23) La
tradición sostiene, sin embargo, que la Deidad de Vṛndādevī se encontraba originalmente
en el sitio que posteriormente soportaría el templo de la Deidad de Govindadeva de Rūpa
Gosvāmī. Hoy en día, esta Deidad de Vṛndādevī puede verse en el templo de
Madana-mohana (que no debe confundirse con el templo de Sanātana Gosvāmī) en Kāmyavan
(Vrāja occidental). (24)
Cumplir el deseo de Śrī Caitanya fue difícil al comienzo, y Śrī Rūpa
se lamentaba de su incapacidad para hacerlo. A Lokanātha y a Bhugarba los
habían enviado a Vṛndāvana mucho antes, pero no obtuvieron mucho apoyo. De este
modo, sentado a la orilla del río Yamunā, Rūpa en la difícil tarea que le
esperaba. Justo en ese momento, un hermoso niño se le acercó y le preguntó la
razón de su desaliento. Él le contó al niño su misión de revivir Vṛndāvana como
lugar de peregrinación para los vaiṣṇavas
y como sede del movimiento. Además, informó al niño sobre su misión de
construir maravillosos templos para la adoración de Rādhā y Kṛṣṇa, y de
establecer una comunidad erudita y literaria para la producción de una teología
sistemática. (25)
Luego de oír la explicación de Śrī Rūpa, el niño hizo ademán de que lo
siguiera, y lo condujo hasta una pequeña colina. “Adentro”, le dijo al Gosvāmī,
“se encuentra la magnifica Deidad de Govindadeva, establecida casi cinco mil
años atrás por Vrāja, el biznieto de Śrī Kṛṣṇa. Durante una de las invasiones
musulmanas, los aldeanos enterraron la Deidad en esta colina para evitar su destrucción,
pero posteriormente se perdió”.
“Todos los días”, continuó el muchacho, “pasa una vaca por este lugar
y derrama su leche por toda la colina. De este modo, la leche se escurre, y
Govindadeva saborea Su comida cotidiana”. Tras describir a Śrī Rūpa esta historia
milagrosa, el niño desapareció. (26)
Un tanto escéptico, Rūpa fue a la mañana siguiente al mismo lugar, sólo
para ver si efectivamente se presentaba una vaca y derramaba su leche por toda
el área.
Para su sorpresa, de hecho apareció una vaca, y el suceso transcurrió
tal y como se lo había contado el niño. Excitado, Rūpa llamó a varios aldeanos
de la localidad para que excavaran ese sitio, pues ahora estaba convencido de
que la Deidad
de Govindadeva estaba enterrada allí.
Finalmente, después de grandes esfuerzos, encontraron a la Deidad y, dirigidos por Rūpa
Gosvāmī, se entusiasmaron por erigir un templo y comenzar la apropiada
adoración. Los habitantes de Vṛndāvana se sentían agradecidos de que Rūpa Gosvāmī
hubiera iniciado esta búsqueda de Govindadeva, y muy pronto se convirtieron en
sus leales seguidores. Rūpa envió entonces noticia a Purī de que su misión en Vṛndāvana
estaba en marcha, y, tras oír esto, Śrī Caitanya envió jubiloso a Kasishwar Paṇḍit
y a otros para que lo ayudaran.
Con el patrocinio del famoso emperador Akbar, pronto se construyó un
templo, aunque no fue terminado hasta 1590 (según reza la inscripción del
templo) o tal vez hasta 1593, (27) algunos años después de que Rūpa Gosvāmī
dejara este mundo. La construcción de este templo, sin embargo, marcó un gran
éxito para la misión de Rūpa Gosvāmī, quien incluso convenció al poderoso mahārāja
Man Singh de Amber (Jaipur) de que donara enormes cantidades de piedra arenisca
roja (28) y de que eventualmente se convirtiera en su discípulo (aunque algunos
dicen que fue discípulo de Raghunātha Bhaṭṭa Gosvāmī, pero aun acerca de esto
hay controversia). Los devotos y sus templos florecieron durante los muchos
años de construcción del templo de Govindadeva.
Mucho después, a comienzos del siglo XVlll, durante una invasión
musulmana acaudillada por el tirano Aurangzeb, el templo fue destruido y la
Deidad, para Su protección fue trasladada a Jaipur, donde es adorada
actualmente. Del templo original de siete pisos de Govindadeva, los pisos
superiores fueron completamente arrasados. Sólo el enorme y cruciforme mahamandap permanece intacto. Este
monumento, sin embargo, tiene una elevación que equivale a varios pisos, y
contiene galerías abiertas y una cúpula abovedada compuesta de arcos apuntados
que se intersectan. (29) En diseño, el templo de Govindadeva, con sus
acentuados ángulos y vanos, ha sido aclamado como una innovación en el campo de
la arquitectura.
Historiadores y expertos en desarrollo arquitectónico lo han descrito
como “el edificio más interesante y elegante que la India clásica haya jamás
producido, al menos en la Alta India, y tal vez el único del que un arquitecto
europeo podría aprovechar unas cuantas sugerencias”. (30)
Si el templo de Śrī Rūpa fue testimonio visible de su dedicación y
devoción, sus actividades literarias lo fueron aun más. El Caitanya-caritāmṛta anota específicamente que Śrī Caitanya apoderó
al Gosvāmī para este enorme trabajo. (31) En consecuencia, él compiló muchos volúmenes
inmensos, dieciséis de los cuales sé consideran sumamente importantes. ¡En
total, escribió más de 100.000 versos! (32) Las obras más famosas incluyen el Vidagdha-mādhava, el Lalitā mādhava, el Bhakti-rasāmṛta-sindhu, el Ujjvala-nīlamaṇi,
el Upadeśāmṛta, el Dāna-keli-kaumudī, y el Laghu-bhāgavatāmṛta. A continuación se describen
varias de estas obras:
Tal como se ha declarado anteriormente, sus dos dramas, el Vidagdha-mādhava y el Lalitā-mādhava, describen los
pasatiempos de Kṛṣṇa en Vṛndāvana y en Dvārakā, respectivamente.
Las pautas íntimas y los rasas
místicos para estos dramas los divulgó el propio Śrī Caitanya cuando, en la
casa de Candraśekhara Ācārya, actuó en representaciones dramáticas para el
placer de los devotos. (33) Estos dramas han sido detallados por los biógrafos
autorizados de Śrī Caitanya y sirvieron de inspiración a Rūpa Gosvāmī al
escribir sus propios dramas.
El Vidagdha-mādhava describe
los pasatiempos íntimos de Rādhā y Kṛṣṇa. Pūrṇamasi ayuda a la Divina Pareja en Sus
encuentros, quien actúa de principio a fin como una dedicada sirvienta. El tema
principal de la obra se centra en una preocupación fundamental de que el esposo
de Rādhārāṇī pudiese alejarla de Kṛṣṇa, creando con ello un serio obstáculo
para la unión de ambos. Por añadidura, Candrāvalī trata de competir con Rādhārāṇī
por el afecto de Kṛṣṇa. El drama permite experimentar la turbulencia íntima de
un rasa conyugal que es, por lo demás,
bienaventurado. No obstante, tranquiliza a su audiencia sobre la victoria
última que es enteramente inevitable en las relaciones espirituales. La obra
transcurre en siete actos. (34)
El Lalitā-mādhava ha sido
brevemente resumido por Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda:
“El Lalitā-mādhava es una
descripción de los pasatiempos de Kṛṣṇa en Dvārakā. Estos pasatiempos fueron
convertidos en un drama, y la obra se terminó en el año 1459 Sakabda [1546 d.C.].
La primera parte versa sobre las festividades al anochecer, la segunda sobre la
matanza del Śaṅkhacūḍa, la tercera sobre la enloquecida Śrīmati Rādhārāṇī, la
cuarta sobre el proceder de Rādhārāṇī hacia Kṛṣṇa, la quinta sobre el logro de Candrāvalī,
la sexta sobre el logro de Lalitā, la séptima sobre el encuentro en Nava-Vṛndāvana,
la octava sobre el disfrute en Nava-Vṛndāvana, la novena sobre la observación
de estampas y la décima sobre la completa satisfacción de la mente. De este
modo, el drama entero se divide en diez partes. (35)
A propósito de estos dos dramas, el Caitanya-caritāmṛta: “Śrīla Rūpa Gosvāmī compuso dos importantes
dramas titulados el Vidaghada-mādhava
y el Lalitā-mādhava, a partir de los
cuales pueden comprenderse todas la melosidades derivadas de los pasatiempos
del Señor Kṛṣṇa”. (36) Esto puede parecer pretencioso, pero, desde el tiempo de
los Seis Gosvāmīs hasta nuestros días, los gauḍīyā
vaiṣṇavas aceptan implícitamente esa conclusión.
Tal vez aun más importantes que estos dos dramas, sin embargo, son El Bhakti-rasāmṛta-sindhu de Rūpa Gosvāmī y
su Ujjvala-nīlamaṇi. Acerca de éstos,
el Caitanya-caritāmṛta declara: “Śrīla
Rūpa Gosvāmī escribió muchos libros, de los cuales el más famoso es el Bhakti-rasāmṛta-sindhu. Con base en ese
libro, se puede comprender la esencia del servicio. Śrīla Rūpa Gosvāmī compuso
asimismo un libro titulado el Ujjvala-nīlamaṇi,
a partir del cual se pueden comprender, hasta los máximos límites, las
aventuras amorosas de Śrī Rādhā y Kṛṣṇa”. (37) Es en estos libros donde
desarrolla él sus bhakti-rasa-śāstra
para beneficio de toda la humanidad.
Al comparar éstos dos últimas obras con los dos dramas, David Haberman
dice:
Cuando llegamos a la teoría de los rasas
de Rūpa Gosvāmī... nos encontramos en un contexto por entero diferente. Para Rūpa,
hay un solo drama capaz de producir verdadero rasa: La divina actuación de Kṛṣṇa. Cuando el análisis se orienta
hacia un solo drama, del cual se sostiene que es la Realidad Última en sí, resultan
cambios significativos. El énfasis, para Rūpa, no está en la capacidad del
drama genérico de elevarnos por encima de la experiencia cotidiana; antes bien,
él está profundamente interesado en los medios por los cuales uno puede
participar en el único Drama Verdadero. Para el gauḍīyā vaiṣṇava, la salvación viene a definirse como una
participación eterna en este drama absoluto. (38)
El Bhakti-rasāmṛta-sindhu es,
de hecho, un análisis científico de cómo participar en el drama eterno de la
vida espiritual. En él, Rūpa Gosvāmī define claramente el gradual desarrollo
del bhakti-rasa, desde la etapa más
práctica, la del vaidhī-bhakti-sādhana
(seguir las reglas y regulaciones básicas) hasta el rāgānugā-bhakti-sādhana, en el cual uno aprende a seguir los pasos
de los habitantes del mundo espiritual (con el expreso propósito de lograr
acceso a él). Esto es otra vez esmeradamente articulado por Haberman:
Para experimentar bhakti-rasa,
el bhakta [“el devoto”] se traslada a
la escena del drama que transforma al mundo. En el sistema religioso de Rūpa, Kṛṣṇa
deviene la pareja dramática del bhakta;
Él es el héroe (nāyaka) del drama
último. El bhakta individual se
relaciona personalmente con Él, reprsentado dramáticamente un papel en esa obra.
El mundo entero, o al menos toda Vrāja (la cual, desde la perspectiva
espiritual correcta, viene a significar lo mismo) deviene un escenario en el
cual actuar el propio papel; de este modo, la religión se convierte en drama, y
actuar se vuelve un camino de salvación. Rūpa necesitaba una teoría dramática
para describir su sistema religioso, y una teoría así estaba ya disponible. Utilizando
los componentes de la teoría Bhārata de los rasas,
Rūpa pudo expresar su interpretación de bhakti
con un agregado sofisticado. (39)
Todo esto es bastante cierto, pero aquí debe señalarse que, así como
la teoría de los rasas no se originó
con Śrī Rūpa, tampoco se originó con Bhārata Muni. Su origen no está, como
algunos pretenden que creamos, constreñido a una teoría estética o a un
lenguaje dramático. El concepto de rasa
es eterno, como lo es cualquier aspecto de la Verdad Absoluta, y se lo puede
encontrar en las secciones más antiguas de la literatura védica.
El Taittirīya Upaniṣad (ll. 7), por ejemplo, declara enfáticamente: Raso vai saḥa, lo que demuestra que la
relación trascendental (rasa) ha sido
siempre parte integral de la comprensión espiritual. Los mejores eruditos
modernos aseveran que la teoría de los rasas
no comenzó en el Nāṭya-śāstra de Bhārata,
y que nunca estuvo “específicamente restringida a la experiencia estética. Posee
matices espirituales, metafisicos y metafóricos”. (40)
Gradualmente, Bhārata Muni incorporó estas ideas en su Nāṭya-śāstra y, éste sí fue utilizado
por Rūpa Gosvāmī, al menos en términos de terminología básica. Así como Bhārata
Muni describe doce rasas -cinco
principales y siete secundarios-, así también lo hace Rūpa Gosvāmī. (41) Pero
sólo hasta aquí llega la comparación. El Gosvāmī desarrolla esto en una
complicada ciencia espiritual, y ello queda reflejado en su Bhakti-rasāmṛta-sindhu. En la actualidad
no hay ninguna buena edición inglesa de esta obra, pero El Néctar de la
Devoción de Su Divina Gracia A. C Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda
constituye un excelente estudio sumario.
Sin embargo, el Ujjvala-nīlamaṇi
retoma el tema allí donde lo dejó el Bhakti-rasāmṛta-sindhu.
Su Divina Gracia A. C Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda resume el contenido de
este clásico espiritual:
Hay también un libro titulado el Ujjvala-nīlamaṇi,
un relato transcendental de relaciones amorosas que comprende metáforas, analogías
y elevados sentimientos de bhakti. En
el Bhakti-rasāmṛta-sindhu se describe
brevemente el servicio devocional en amor conyugal, pero en el Ujjavala-nīlamaṇi se lo describe muy
elaboradamente. Este libro describe diferentes tipos de amantes, sus asistentes
y aquellas que le son muy queridas a Kṛṣṇa. También hay una descripción de Śrīmati
Rādhārāṇī y de otras amantes, así como otras que le son muy queridas a Kṛṣṇa, están
todas descritas. El libro relata asimismo cómo se despierta el amor por Kṛṣṇa y
describe la situación extática, la situación devocional, el éxtasis permanente,
el éxtasis perturbado, el éxtasis constante, las diferentes posiciones de
diferentes vestidos, los sentimientos de separación, la atracción previa, la
ira en la atracción, las variedades de relaciones amorosas, la separación del
amado, el encuentro con el amado y el disfrute, directo e indirecto, entre la
amante y el amado. Todo esto se ha descrito muy elaboradamente. (42)
En ésta, su obra más desarrollada, Rūpa Gosvāmī describe claramente
los diversos niveles de amor divino. Mādhurya-rati, el amor por Dios, puede de
hecho manifestarse en cualquiera de los cinco rasas, pero se desarrolla en especial en el rasa conyugal. En consecuencia, es esta relación en particular la
que constituye el foco del Ujjavala-nīlamaṇi.
Brevemente, los diversos niveles de amor divino se describen como sigue:
Después de los rigores del vaidhī-bhakti-sādhana
y del rāgānugā-bhakti-sādhana, el
corazón se da al Señor Supremo con devoción plena, y uno queda establecido en
su relación eterna con Él. Esto es prema,
que más claramente se define como el maduro vínculo de emociones amorosas (bhāva-bandana) entre el hombre y Dios.
Experimentado en diversas etapas, prema
puede ser plenamente desarrollado (prauḍha),
medianamente (madhya), o levemente (manda). Cada nivel conduce al siguiente
y culmina en sneha, que se refiere a
un total derretirse del corazón. Así como uno produce mantequilla clarificada (ghī) hirviendo todas las impurezas, sneha es el nivel en el que el corazón
se derrite como mantequilla a causa del intenso afecto por Kṛṣṇa.
A continuación viene mana, o
el nivel extremadamente avanzado en el que puede que se experimente realmente
un sentimiento de indignación proveniente del afecto insatisfecho. Esto es un “truco
de amor” que Kṛṣṇa les juega a Sus devotos, acrecentando invariablemente el
apego de ellos por Él.
Esto conduce a praṇaya, una
intimidad amorosa en la que uno quiere tener a Kṛṣṇa como su exclusivo
confidente. En este nivel es claramente visible una exclusiva devoción amorosa
por Kṛṣṇa, la cual puede conducir a la plataforma más elevada de éxtasis.
Desde aquí, uno llega gradualmente a rāga, o “total apego”, y de ahí a anurāga, o “apego más refinado”. Esto, luego, conduce a bhāva, o “éxtasis total”. Por encima de
este nivel está mahābhāva, pero esta
posición espiritual es principalmente experimentada por Rādhārāṇī y el círculo
íntimo de gopīs. Esta posición es de
amor ilimitado y, por lo general está fuera del alcance de un alma limitada. De
este modo, el Ujjavala-nīlamaṇi
describe de principio a fin la ciencia de los rasas y los niveles sucesivos de amor divino. (43)
La penetración de Rūpa Gosvāmī dentro de los niveles más profundos de
la conciencia de Kṛṣṇa no deben sorprendernos, ya que, además de recibir la
instrucción de Caitanya Mahāprabhu, y de ser apoderado por Él para escribir
literatura trascendental, la identidad espiritual de Rūpa Gosvāmī revela su
extraordinaria posición trascendental. Él es una encarnación de Rūpa-mañjarī, una
de las asistentas más íntimas de los asuntos amorosos entre Rādhā y Kṛṣṇa. (44)
“Por ofrecerle nueces de betel,
por masajear Sus pies, por traerle agua, por arreglar Sus encuentros secretos
con el Señor Kṛṣṇa, y por desempeñar muchos otros servicios, muchas doncellas gopīs complacen afectuosamente a Śrī Rādhā,
la reina del bosque de Vṛndāvana. Cuando la divina pareja disfruta de Sus
pasatiempos, estas doncellas no se muestran tímidas en absoluto, ni siquiera en
presencia de las grandes gopīs para
quienes Śrī Rādhā es más querida que la vida misma. Yo me refugio en estas
doncellas gopīs, que tienen por líder
a Śrīmati Rūpa-mañjarī”. (Vrāja-vilāsa-stava
38)
Notas
1. Que Kūrmadeva tenía cinco
hijos fue ilustrado en una tabla genealógica por Śrī Haridāsa Dās: el Śrī Śrī Gauḍīyā Vaiṣṇava Abhidhan (Navadvīpa,
Haribol Kutir, 471 Caitanyabda), p. 1248. La historia de este abhidhan (o “diccionario) es interesante.
Fue una obra iniciada originalmente por Śrīla Bhaktisiddhanta Sarasvatī Ṭhākura,
una de las más grandes autoridades de los tiempos actuales sobre el gauḍīyā vaiṣṇavismo. Sin embargo, él
nunca completó el proyecto. En lugar de ello, dio su obra a un joven erudito de
nombre Haridāsa Dās, quien, finalmente, completó y publicó el abhidhan.
La hermana de Rūpa Gosvāmī es
mencionada en el Caitanya-caritāmṛta (op.
cit., Madhya-līlā 8, Cap. 20, texto
38, p. l9).
2. Amara y Santosh son nombres
que se atribuyen a veces a Rūpa y Sanātana antes de su iniciación por Śrī
Caitanya. Existe alguna evidencia en apoyo de esto (véase S. K. De, Early
History of the Vaiṣṇava Faith and Movement in Bengal Historia temprana de la fe
y el movimiento vaiṣṇava en Bengala),
op. cit., p. 147). Pero ello no parece estar basado en fuentes autoritativas
anteriores.
Una vez más, cabe mencionar
que Jana cree que “Rūpa” y “Sanātana” son los nombres originales de Rūpa y Sanātana
Gosvāmī. Pero la evidencia citada evidencia del Caitanya-caritāmṛta respecto a esto basta para silenciar a Jana.
Además, en la iniciación es
imprescindible cambiar el nombre del discípulo. Śrī Caitanya definitivamente lo
habría hecho cuando inició a Rūpa y Sanātana. En consecuencia, éstos no pueden
haber sido sus nombres originales.
3. La Dinastía Hussein Shahita
deriva su nombre de Alauddin Hussein Shah, gobernante de Bengala de 1494 a 1519 [véase Ainslie T.
Embree, Encyclopedia of Asian History, Vol. 2 (New York, Charles Scribner's
Sons, l988), p. 88.]
El sultán Barbak Shah reinó
anteriormente, quizá de 1460
a 1470, y fue un monarca liberal. Se dice que dio cabida
a una diversidad de creencias religiosas, muy a la manera en que lo haría Akbar
años después. En el Śrī Śrī gauḍīyā Vaiṣṇava
Abhidhan (op. cit., p. 1397) se sugiere asimismo que el abuelo de Rūpa Gosvāmī,
Mukunda Miśra, fue un poderoso líder en su régimen.
Pronto, sin embargo, el hijo
del sultán Barbak, Shams-ud-din Yussuf Shah (1476-81), llegó al poder. A
continuación, el hijo de Yussuf, Sikandar Shah, ascendió al trono. A diferencia
del calificado Barbak Shah que vino antes que ellos, estos dos hombres fueron líderes
ineficientes a la vez que intolerantes. El insulto se sumó al daño cuando
Jalal-ud-din Fath Shah. También conocido como Hussein Shah, ascendió a
continuación al trono. Este era un tirano y se oponía a los principios
religiosos. Ello está explicado en A. K. Majumdar, Caitanya: His life and
Doctrine [Caitanya: Su vida y Su doctrina] (Bombay, Bharatiya Vidyā Bhavan, 1969),
pp. 84-5
De acuerdo con el Navadvīpa Dhāma Māhātmya (manuscrito no
publicado, trad. Banu Dās, p. 19) de Bhaktivinoda Ṭhākura, Hussein Shah es en
realidad Jarāsandha, el de los pasatiempos de Kṛṣṇa, y es por tanto un asociado
eterno del Señor. Para más información sobre este régimen político, véase
Momtazur Rahman Taradfar, Hussein Shahi Bengalí: A Socio-Political Study [La Bengala de Hussein Shah:
Estudio Socio-politico] (Dacca, Asiatic Society of Pakistan, 1965).
4. Bhakti-ratnākara, op. cit., First Wave, textos 581-85, p. 28. Véase también Jadunatha Sinja,
Jīva Gosvāmī's Religión of Devotion and Love [La religión de Devoción y Amor de
Jīva Gosvāmī] (Varanasi, Chowkhamba Vidyābawam, 1983).
5. Bhakti-ratnākara, Ibid.
6. Ibid.
7. Ibid.
8. Ibid.
9. Ibid.
10. Ibid.
11. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Adi-līlā
2, Cap. 10, texto 84, significado.
12. Bhakti-ratnākara, op. cit., First Wave, texto 598, p. 29.
13. D. C. Sen, The Vaiṣṇava Literature of Medieval Bengal
[La literatura vaiṣṇava de la Bengala Medieval ] (Calcuta, University of Calcuta,
1917), p. 29.
14. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Madhya-līlā
1, capítulo 1.
15. Ibid. Véase también Su
Divina Gracia A. C Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda, The Golden Avatar. Teachings of Lord Caitanya [El avatār dorado:
Las enseñanzas del Señor Caitanya] (Los Ángeles, Bhaktivedanta Book Trust, l974,
reimpresión), pp. 22-41. Véase también Kundali Dās, “The Glories of Lord Caitanya, Part 12: Instructions to Rūpa Gosvāmī”
[“Las glorias del Señor Caitanya, Parte 12: Las instrucciones a Rūpa Gosvāmī”],
en Back to Godhead, 21, No. 1, enero
1986, pp. 33-4.
16. Ibid.
17. Ibid.
18. D. C. Sen, op. cit., p. 30.
19. Ibid.
20. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Antya-līlā
2, Cap. 4, texto 26, p. 13.
21. Ibid., texto 214, p. 103.
22. Charles R. Brooks, Hare Kishnas in India [Los Hare Kṛṣṇas
en la India ], op.
cit., p. 49.
23. F. S. Growse, Mathurā: A
District Memori [Memoria del distrito de Mathurā]
(New Delhi, Asian Educational Services, l979, reimpresión), p. 61.
24. Dhruva Mahārāja Dās, Vṛndāvana
Dhāma Ki Jail, op. cit., p. 26.
25. Ibid., p. 56.
26. Ibid. Algunas veces se
dice que no fue un niño sino una joven quien se le acercó.
Otras veces se dice que todo
le fue revelado en un sueño.
27. Public Divition of the
Ministry of Information and Broadcasting, Temples of North India [Templos de la India Septentrional ],
Edición Revisadā (New Delhi, Government of India, l968), pp. 20-21.
28. Ibid.
29. Ibid.
30. Ibid.
31. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Madhya-līlā
1, Cap. 1, texto 73, p. 49.
32. Ibid., Antya-līlā 2, Cap. 4, texto 226, p. 109.
33. Svāmī B. H. Bon, “Drama”, en
Indian Philosophy and Culture (U. P.,
India, Institute of Oriental Philosophy, Diciembre l966), Vol. 12, No. 4, p. 8.
34. Véase Donna Wulff, Drama as a Mode of Religious Realizacion:
The Vidaghamadhava of Rūpa Gosvāmī [El drama como modalidad de realización
religiosa: El Vidagdhāmadhava de Rūpa Gosvāmī] (Chico, Calif, Scholars Press, 1984).
35. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Madhya-līlā
1, Cap. 1, texto 41, significado.
36. Ibid., Antya-līlā 2, Cap. 4, pp. 108-9.
38. David L. Haberman, op. cit.,
pp. 35-6.
39. Ibid., p. 34.
40. K. Kṛṣṇamoorthy, “Caitanya Bhakti-Rasa in Sanskrit” [“El Bhakti-rasa de Caitanya en sánscrito”] en V. N.
Miśra, ed., Follow the Notes of the Flute (New Dehli, Sahitya Akademi, l987), p.
104.
41. Los siete rasas
secundarios son: Ira, asombro, comedia, caballerosidad, misericordia, temor y
espanto.
42. Para detalles véase S. K. De,
“The Bhakti-Rasa-Sastra of Bengal
Vaisnavism”
[“El Bhakti-rasa-śāstra del vaiṣṇavismo
bengalí”] en The Indian Historical Quarterly, Vol. 8, No. 4. Diciembre 1932, p.
682.