Rūpa Gosvāmī



Rūpa Gosvāmī

Kumardeva y Revatīdevī tuvieron una hija y cinco hijos. (1) De estos hijos. Sanātana, Rūpa (1489-1564) y Ballabha fueron conocidos como devotos puros. Su linaje sarasvatī-brāhmaṇa era oriundo de Karnakata, en el Sur de la India, pero Kumardeva se mudó a Baklacandravip (la moderna Barisal), cerca de Rāmasari, en el distrito de Jessore, Bengala Oriental. Es aquí donde los tres piadosos muchachos fueron criados. Los eruditos afirman que Rūpa y Sanātana eran conocidos en aquellos días como Amara y Santos, (2) respectivamente. Los nombres “Rūpa” y “Sanātana” les fueron dados mucho después por Śrī Caitanya.
Cuando se encontraron por primera vez con el Señor, Rūpa y Sanātana estaban trabajando para el gobierno musulmán de ocupación de Bengala bajo las órdenes del nawab Hussein Shah, el entonces emperador de Gauḍa. (3) En esa época, recibieron los títulos persas de Dabir Khas (“secretario privado”) y Sakara Malik (“oficial de rentas”), (4) y gozaban de gran riqueza y prestigio como líderes políticos en un régimen en crecimiento.
No obstante, eran estudiantes ávidos de las escrituras y nunca olvidaban los pies de loto del Señor. Aun antes de encontrarse con Śrī Caitanya, gozaban de renombre en toda la India por su gran erudición y su intensa devoción. (6) Rūpa ya había escrito varios libros sobre filosofía védica, inclusive su hoy famoso Haṁsadūta, y Sanātana solía recitar regularmente el Śrīmad-Bhāgavatam, con lágrimas de éxtasis, para todo el que quisiera escuchar. Así, pues, surge una pregunta obvia: ¿Por qué querrían estos dos hermanos inclinados espiritualmente, invertir aun una fracción de su valioso tiempo en una carrera política mundana?
Según el bhakti-rainakara, ellos fueron reclutados para sus deberes gubernamentales por el Nawab Hussein Shah, quien los amenazó con la expulsión física y la muerte de devotos piadosos. (7) El se había enterado de cuán amados por la gente común eran Rūpa y Sanātana, y que eran conocidos como rāja-sihsta (“los reyes de la erudición”) (8) por su pericia en el conocimiento de las escrituras. “Si pudiera obligarlos a entrar a mi servicio”, razonaba el Nawab, “podría conquistar con más éxito el apoyo de la gente en general.
Debe entenderse, sin embargo, que su temor no estaba motivado por el egoísmo.
El Bhakti-ratnākara afirma claramente que estaban más preocupados por la amenaza del Nawab de causar daño a la sociedad de vaiṣṇavas. Si desobedecían, las repercusiones serían horrendas. En consecuencia, aceptaron el servicio de Hussein Shah. El Nawab, encantado con esta conquista, otorgó grandes riquezas a los dos hermanos a medida que desempeñaban solícitamente su servicio.
Kumardeva, su padre, rezaba por ellos, pero en lo profundo de su ser sabía que ellos eran grandes devotos y que Kṛṣṇa debía de tener algún plan. Dabir Khas y Sakara Malik sentían inquietud con respecto a sus nuevas ocupaciones, y sostuvieron correspondencia con Śrī Caitanya, con la esperanza de que les concediera Su asociación algún día, y de que tal vez pudiera resolverles su dilema.
Resignándose temporalmente a su destino, se establecieron en Rāmakeli, una aldea situada unas dieciocho millas al sudeste de Malda (en el distrito de Rajasani, en Bengala septentrional). Allí usaron su gran riqueza para construir una réplica de la morada de Śrī Kṛṣṇa -una “Vṛndāvana Oculta” (gupta)-, complementada con primorosos balnearios y constantes lecturas sobre los pasatiempos del Señor. (11) De esta manera, procuraban aliviar su “sentencia” de empleo gubernamental.
A medida que estudiaban y transmitían las escrituras a sus colegas musulmanes, los dos hermanos se volvieron expertos en sánscrito, árabe, persa, así como en otros dialectos locales. Se dice que estudiaron sánscrito bajo la guía del renombrado Sarvānanda Vidyā-Vācaspati (el hermano de Sārvabhauma Bhaṭṭācārya) (12) y que su conocimiento del árabe y del persa lo adquirieron con la ayuda de Syed Fakir-un-Din, un reputado erudito y terrateniente de Saptagram. (13) De esta manera, pasaban su tiempo en Rāmakeli, mientras externamente (pero también competentemente) desempeñaban los deberes de estado.
Cierta vez, cuando Śrī Caitanya decidió ir a Vṛndāvana (en 1514), se detuvo en Rāmakeli específicamente para encontrarse con Dabir Khas y Sakara Malik, Para ese entonces, Él iba acompañado por miles de seguidores, todos los cuales estaban cantando y bailando con Él. Al oír que había llegado, los dos hermanos hicieron planes para verlo. Siendo como eran, funcionarios musulmanes, decidieron acudir en plena noche a fin de no ser observados. (14)
Atravesando la multitud de dedicados devotos, se encontraron primero con Nityānanda Prabhu y Haridāsa Ṭhākura, quienes de inmediato hicieron conocer su llegada a Śrī Caitanya. El Señor se llenó de júbilo cuando vio a Sus dos asociados eternos, y ellos, a su vez, se llenaron de júbilo al verlo a Él.
Como símbolo de su humildad, ambos hermanos tomaron manojos de paja y se los pusieron entre los dientes. Cayendo ante los pies de loto de Śrī Caitanya, lloraron con dicha ilimitada. Finalmente estaban reunidos con su Señor y salvador, y sabían que Él pondría ahora fin a su aprieto con Hussein Shah.
Levantándose del suelo. Dabir Khas y Sakara Malik (su hermano menor, Ballabha, estaba también allí) ofrecieron sinceras oraciones a Śrī Caitanya: “¡Todas las glorias a Śrī Kṛṣṇa Caitanya Mahāprabhu! Tú eres el muy misericordioso salvador de las almas caídas. ¡Todas las glorias a Tu suprema personalidad!
“Nosotros pertenecemos a la clase más baja de hombres”, continuaron, “y nuestros asociados y empleo son del tipo más bajo. Por lo tanto, nos resulta extraño presentarnos a Ti. Como Tú eres tan puro, nos sentimos avergonzados. Querido Señor, permítenos asegurarte que nadie es más pecaminoso que nosotros, ni existe Señor, ofensor alguno como nosotros. Puesto que te has encarnado específicamente para liberar a las almas caídas, por favor considera que no hay ninguna tan caída como nosotros dos, pues somos peores que Jagāi y Mādhāi”. De esta manera, los dos hermanos se presentaron humildemente ante Śrī Caitanya.
Cuando se compararon a Jagāi y Mādhāi, dos de los más pecaminosos receptores de la misericordia del Señor, Śrī Caitanya les habló: “Ustedes dos son Mis sirvientes eternos. Desde este día, sus nombres serán cambiados a Śrī Rūpa y Śrī Sanātana. Ahora, por favor, abandonen su humildad, pues el corazón se Me está partiendo de verlos tan humildes. “Śrī Caitanya inició así a Sus dos más grandes seguidores en el gauḍīyā vaiṣṇavismo.
Él continuó: “Ustedes han escrito varias cartas que demuestran su humildad. Por esas cartas puedo comprender su verdadero grado de avance espiritual. Dicho sea de paso, Yo, en realidad, no tenía nada que hacer en Rāmakeli, he venido aquí específicamente por ustedes dos”. Asegurando a Rūpa y Sanātana que su ocupación mundana en el gobierno de Hussein Shan terminaría pronto, Él les aconsejó que se fueran a casa y que no se preocuparan por su futuro. Ahora que se habían rendido, su futuro estaba en manos de Kṛṣṇa.
“Nacimiento tras nacimiento”, les dijo Śrī Caitanya, “ustedes han sido Mis sirvientes eternos. Estoy seguro de que Kṛṣṇa los liberará muy pronto”. (16) El Señor les puso entonces Sus dos manos sobre la cabeza. Sintiéndose avergonzados por este ademán, ellos se inclinaron ante Él y pusieron los pies de Él, no Sus manos, sobre sus cabezas. Después de esto, Śrī Caitanya los abrazó y pidió a todos los devotos que derramaran sus bendiciones sobre ellos.
Antes de marcharse, los dos hermanos expresaron inquietud por el hecho de que Śrī Caitanya continuara en el camino a Vṛndāvana. Ellos le advirtieron que Hussein Shah, aunque respetuoso, estaba preocupado por su propia carrera política y podría causar daño a un poderoso predicador religioso como Śrī Caitanya, en especial si descubría que sus dos mejores hombres dejarían pronto su servicio en favor de este predicador.
Al ver que este argumento no detenía a Śrī Caitanya, ellos le recordaron que era impropio en la etiqueta de un sannyāsī el viajar a Vṛndāvana con su gran séquito.
Esta consideración final fue suficiente para disuadirlo, y Śrī Caitanya pronto regresó a Purī. Por cierto, después de varios meses, el Señor intentó nuevamente ir a Vṛndāvana y llegó allí sin incidente alguno.
Śrī Rūpa Gosvāmī y su hermano menor, Ballabha (a quien Śrī Caitanya llamó “Anupama”), pudieron esta vez renunciar al mundo y vivir como mendicantes viajeros.
Sanātana Gosvāmī, por otro lado, estaba aún atado por compromisos previos dentro de la administración del Nawab. Él, por lo tanto, no pudo dejar su cargo oficial al mismo tiempo que sus hermanos.
Viajando a Prayag (la actual Allahabad), Rūpa y Anupama se volvieron a encontrar con Śrī Caitanya, ya que estaban propagando Su mensaje en ese distrito, y Él estaba regresando a Purī después Su exitosa peregrinación a Vṛndāvana.
Aprovechando el auspicioso encuentro, por espacio de diez días instruyó a los dos hermanos con respecto a kṛṣṇa-tattva, la verdad última acerca de Śrī Kṛṣṇa; bhakti-tattva, la verdad acerca de la devoción a Kṛṣṇa; y rasa-tattva, la verdad sobre las trascendentales relaciones amorosas con Kṛṣṇa.
Mientras se aproximaban a Śrī Caitanya, una vez más con muchísima humildad, ellos ofrecieron una oración memorable:

namo mahā-vadānyāya
kṛṣṇa-prema pradāya te
kṛṣṇāya-kṛṣṇa-caitanya
nāmne gaura-tviṣe namā

“¡Oh muy misericordiosa encarnación del Señor! Tú eres Kṛṣṇa Mismo apareciendo como Śrī Caitanya. Tú has asumido el color dorado de Rādhārāṇī, y estás distribuyendo libremente lo que ninguna otra encarnación ha distribuido nunca: amor puro por Dios”.
Sintiéndose complacido con esta oración, Śrī Caitanya comenzó a instruir a Rūpa y Anupama: “El océano de relaciones espirituales en lo referente al servicio devocional es tan grande, que es imposible describirlo por completo. Nadie puede calcular el largo y ancho de ese océano. Mas, tan sólo para ayudarlos a apreciar sus incalculables dimensiones, compartiré con ustedes una gota”. Procedió entonces a describir la naturaleza del alma con riguroso detalle, sustentando Sus declaraciones con referencias a la literatura védica.
Śrī Caitanya explicó que, “la medida del alma espiritual es muy, muy diminuta: su medida es la diezmilésima parte de la punta de un cabello. Estas infinitesimales entidades vivientes existen en número ilimitado, y son de dos tipos: móviles e inmóviles. Las entidades móviles se dividen en especies humanas y no humanas, y las especies humanas se subdividen en culturas civilizadas y no civilizadas. Aquellos que siguen principios espirituales, en particular los que están enunciados en la cultura védica, se cuentan como civilizados. Y, entre éstos, hay muchos que son meramente practicantes superficiales”.
“Entre los seguidores serios de una cultura espiritual, la mayoría están, en el mejor de los casos, interesados principalmente en la salvación personal (si es que no se interesan en búsquedas francamente materialistas que están meramente endulzadas con sabor espiritual)”. “De éstos”, señaló Śrī Caitanya, “en verdad es rara la persona ha progresado lo suficiente como para indagar sinceramente sobre la meta última de la vida (y buscarla). De muchos millones de tales individuos espiritualmente maduros, puede que uno logre realmente la salvación genuina. Y de millones de estas almas especialmente afortunadas, muy pocas alcanzan alguna vez el nivel de la devoción pura”.
Śrī Caitanya decidió precisar este punto: “a medida que los ilimitados seres vivientes deambulan por los múltiples universos materiales, vida tras vida en diferentes especies, se empeñan en una incesante búsqueda de paz y felicidad. A veces disfrutan de placeres celestiales, y a veces padecen sufrimientos infernales. No obstante, si un alma se vuelve uno de los pocos afortunados, obteniendo la oportunidad de asociarse con un maestro espiritual fidedigno (un devoto puro de la sucesión discipular), en ese momento recibe el codiciado bhakti-latā-bīja, o semilla del servicio devocional (la cual arraiga entonces firmemente en su corazón)”.
Rūpa y Sanātana estaban saboreando estas explicaciones, de modo que el Señor las precisó aun más: “Una persona así de afortunada”, dijo Śrī Caitanya, “debe atender cuidadosamente la semilla de la devoción como un jardinero competente. Debe regarla asiduamente mediante el proceso de oír y cantar acerca de las glorias de Kṛṣṇa. Gradualmente, la semilla brota y la enredadera del servicio devocional crece y crece, perforando las paredes de nuestro universo condicionado, llevando a esa persona hasta el mundo espiritual.
Cuando el alma que personifica la enredadera de la devoción arriba finalmente a Goloka Vṛndāvana, la morada suprema de Śrī Kṛṣṇa, produce cantidades abundantes de prema-phala, los frutos del amor divino. Estos dones eternos soportan toda la manifestación cósmica y son los únicos bienes que dan verdadero, placer, tanto para la entidad viviente como para la Suprema Personalidad de Dios”.
Rūpa y Sanātana fueron advertidos a continuación de que “el candidato al servicio devocional puro, mientras esté cultivando la enredadera de la devoción, debe tener cuidado de no cometer ofensas contra los vaiṣṇavas. Semejantes ofensas se asemejan a un elefante enloquecido que arranca de raíz la enredadera devocional, haciendo que ésta se sofoque y muera. El jardinero espiritual debe aprender a proteger su enredadera devocional de la ofensa del elefante enloquecido”.
Śrī Caitanya precisó otro posible peligro en la senda de la devoción: “Al lado de la enredadera devocional, pueden crecer las malas hierbas, y el jardinero debe tener cuidado de no nutrirlas al regar su enredadera devocional”. A medida que Rūpa Gosvāmī y Anupama escuchaban esta analogía de la “enredadera devocional”, florecía su comprensión espiritual.
Śrī Caitanya usó asimismo la analogía del “azúcar”para explicar adicionalmente los niveles progresivos de prema, el amor puro por Dios. Primero viene la semilla de la caña de azúcar, y luego la planta de la caña. De la planta, se puede extraer el dulce jugo de la caña de azúcar. Cuando se hace hervir este jugo, se vuelve melaza líquida y, cuando se cuece más, se vuelve melaza sólida. Esta melaza se convierte luego en azúcar y, finalmente, en azúcar cande. De este modo, el azúcar se desarrolla gradualmente desde un estado crudo hasta uno refinado. De manera similar, el amor por Dios evoluciona a través de estados cuidadosamente descritos, cada uno más concentrado que el anterior.
Pormenorizando científicamente todas estas etapas, usando una compleja terminología sánscrita, Śrī Caitanya explicó a continuación a los dos hermanos cómo el amor puro culmina en la autorrealización y cómo empieza uno a restablecerse en su relación original con Kṛṣṇa. Estas relaciones (rasa-tattva) existen en cinco formas principales: śānta-rati, apreciación neutral del Señor, dāsya-rati, apego en servidumbre; sakhya-rati, apego en amistad; vātsalya-rati, apego en afecto paterno; y mādhurya-rati, apego en amor conyugal. Esta teoría de los rasas fue posteriormente sistematizada por Rūpa Gosvāmī en el Bhakti-rasāmṛta-sindhu y desarrollada aun más en el Ujjvala-nīlamaṇi.
A continuación, Śrī Caitanya les explicó a Rūpa y Anupama que el apego a Kṛṣṇa es bien en temor reverencial, o bien en amor puro y espontáneo. Esta discusión fue similar en contenido a Sus conversaciones con Vyeṅkaṭa Bhaṭṭa, el padre de Gopāla Bhaṭṭa Gosvāmī. El apego en temor reverencial, dijo Él, se encuentra en todos los planetas espirituales a lo largo y ancho del Reino de Dios.
Sin embargo, hay una excepción, y Śrī Caitanya se apresuró a señalarla. Esa excepción es Goloka Vṛndāvana, el planeta espiritual más elevado. En otros niveles espirituales, las opulencias del Señor son prominentes, y predomina el servicio devocional en neutralidad y servidumbre. Pero en Goloka Vṛndāvana las relaciones prominentes con Śrī Kṛṣṇa son la fraternal, la paternal y la conyugal, relaciones íntimas que son en realidad estorbadas por los sentimientos de temor reverencial. Los devotos de Goloka Vṛndāvana experimentan la ilimitada opulencia del Señor, pero no están atemorizados por ella, porque ellos ponen énfasis en una relación natural, espontánea y amorosa con Kṛṣṇa.
Cada etapa de amor se caracteriza por tener todas las cualidades de las etapas precedentes más un incremento en sentimientos de intimidad con el Señor. La servidumbre, por ejemplo, incluye la neutralidad, y el apego fraternal incluye elementos tanto de neutralidad, sin embargo, la fraternidad está generalmente desprovista de formalidad y veneración, al menos en los niveles más íntimos. Lo mismo vale para el amor paternal y conyugal. Los devotos situados en el apego de amor paternal, además de tener sentimientos de neutralidad, servidumbre y amistad, puede que también se consideren mantenedores del Señor. Esto tiene un gusto excepcionalmente dulce para Kṛṣṇa ya que Él le permite a Su devoto que adopte una posición extremadamente responsable. En este punto, Él confía en ellos en forma ilimitada, y se coloca sin reservas bajo su cuidado.
Las cuatro relaciones mencionadas culminan sin excepción en la relación de amor conyugal. Aquí, el fundamental apego por Kṛṣṇa, el servicio a Él, los sentimientos íntimos de fraternidad y la madura concepción de mantenerlo a Él aumentan todos en intensidad. Sin embargo, debe advertirse al lector que el “amor” en discusión no es del tipo al que estamos acostumbrados en el mundo del nacimiento y la muerte. El amor espiritual descrito por Śrī Caitanya está desprovisto de carnalidad, superficialidad e impermanencia, cualidades características del “amor” en la esfera material. En contraste, el rasa conyugal es completamente espiritual, extremadamente profundo y es eterno. Este nivel de amor divino es tan exaltado, que Śrī Caitanya les dijo a Rūpa y Anupama que no puede ser descrito a cabalidad. No obstante, los tres disfrutaron de un gran éxtasis espiritual al aludir a este tema, y, posteriormente, Śrī Rūpa recibió el título de “rasācārya” en reconocimiento a su pericia en el área de la teología de los rasas.
Śrī Caitanya concluyó así Sus instrucciones a Rūpa y Anupama diciendo: “Les he dado, simplemente, un repaso general de las verdades del servicio devocional. Ustedes pueden considerar la manera de ajustarlo y explicarlo más elaboradamente. Cuando se piensa constantemente en Kṛṣṇa, el amor por Él se manifiesta dentro del corazón. Aun cuando uno sea ignorante, por la misericordia de Śrī Kṛṣṇa y de Sus representantes apoderados, uno puede alcanzar la orilla del océano de amor espiritual”. (17)
Después de estos diez días juntos, Rūpa y Anupama no querían alejarse del lado del Señor. Lo acompañaron hasta Benares, y le suplicaron proseguir hasta Purī. Pero Śrī Caitanya les pidió que visitaran primero Vṛndāvana y que más adelante se encontraran con El en Purī, después de atravesar Bengala. Obedeciendo el pedido de su Señor, los dos hermanos fueron a Vṛndāvana y, después de una corta estadía, decidieron que era hora de encontrarse con El en Purī. En el camino, Anupama dejó este mundo.
Fue mientras viajaban a Purī que Rūpa Gosvāmī concibió por vez primera el escribir obras dramáticas como un medio factible de transmitir los pasatiempos de Kṛṣṇa. Preparando un bosquejo básico para tales obras, escribió el borrador de un drama sobre las actividades de Kṛṣṇa como pastorcito de vacas en Vṛndāvana y como rey en Dvārakā. Poco después de comenzar esta obra, Rūpa llegó a una aldea conocida como Satiabhamapura (en Orisa). Esa noche, tuvo un sueño en el que una hermosa mujer se le aparecía y le pedía que escribiese una obra, aparte, sobre ella. A la mañana siguiente, comprendió que se trataba de la reina de Kṛṣṇa, Satyabhāmā, quien le pedía que escribiera dos obras separadas sobre los pasatiempos del Señor en Vṛndāvana y en Dvārakā.
Cuando Rūpa Gosvāmī llegó finalmente a Purī, le mostró el bosquejo de sus dos dramas a Śrī Caitanya, quien le confirmó que hay una gran diferencia entre los pasatiempos de Kṛṣṇa en Vṛndāvana y aquellos en Dvārakā, y que es apropiado describirlos en dos obras diferentes. Los pasatiempos de Vṛndāvana exhiben le aspecto mādhurya, íntimo, del Señor, mientras que los majestuosos pasatiempos de Dvārakā son característicos de Su aspecto aiśvarya. El hecho de combinarlos constituiría una inapropiada mezcla de rasas.
El Caitanya-caritāmṛta describe el gran deleite de Śrī Caitanya y de Rāmānanda Rāya al leer los primeros borradores de la obra de Rūpa Gosvāmī. Pero aquí debe mencionarse que los libros no fueron terminados hasta años después. Los pasatiempos de Vṛndāvana fueron completados en 1532, y titulados el Vidagdha-mādhava. (18) El episodio de Dvārakā de la vida de Kṛṣṇa fue completado en 1546 y titulado el Lalitā-mādhava. (19) Estas dos obras son consideradas hoy por los gauḍīyā vaiṣṇavas como las más importantes literaturas dramáticas existentes en idioma sánscrito.
Antes de describir con todo detalle la obra de Rūpa Gosvāmī, es significativo observar que permaneció con Śrī Caitanya por espacio de nueve meses en Purī y que recibió de Él instrucciones adicionales sobre la ciencia de la conciencia de Kṛṣṇa. (20)
Luego, tras oír de labios de Śrī Caitanya que debía ir a la tierra sagrada de Vṛndāvana para desenterrar los sagrados lugares ocultos, establecer templos prominentes y escribir libros sobre la filosofía que Él le había enseñado, Śrī Rūpa partió para cumplir la misión de Śrī Caitanya Mahāprabhu.
Al pasar por Bengala, se demoró durante doce meses completos. (21) Sintiendo que su renuncia al mundo podía ocasionar inconvenientes a sus familiares y parientes, Śrī Rūpa decidió dividir sus riquezas entre ellos para darles así una sensación de seguridad. Adicionalmente, donó grandes sumas a la comunidad brahmínica y a los templos de Bengala. Los trámites deben de haber tomado tiempo, porque no fue hasta un año más tarde que llegó a Vṛndāvana.
Aunque ha sido tema de controversia, se ha asegurado que, poco después de llegar, Śrī Rūpa Gosvāmī estableció una Deidad de Vṛndādevī, una diosa que “no sólo llevaba el nombre de la ciudad, sino que era también considerada como un aspecto encarnado de Kṛṣṇa”. (22) De hecho, a Vṛndādevī se la conoce como la propietaria de Vṛndāvana y es una encarnación de una gopī de la categoría sakhī, una sirvienta muy íntima de Kṛṣṇa. El historiador F. S. Growse afirma que la Deidad estaba originalmente ubicada en la actual Sevā-kuṅjā, cerca del centro de la ciudad. (23) La tradición sostiene, sin embargo, que la Deidad de Vṛndādevī se encontraba originalmente en el sitio que posteriormente soportaría el templo de la Deidad de Govindadeva de Rūpa Gosvāmī. Hoy en día, esta Deidad de Vṛndādevī puede verse en el templo de Madana-mohana (que no debe confundirse con el templo de Sanātana Gosvāmī) en Kāmyavan  (Vrāja occidental). (24)
Cumplir el deseo de Śrī Caitanya fue difícil al comienzo, y Śrī Rūpa se lamentaba de su incapacidad para hacerlo. A Lokanātha y a Bhugarba los habían enviado a Vṛndāvana mucho antes, pero no obtuvieron mucho apoyo. De este modo, sentado a la orilla del río Yamunā, Rūpa en la difícil tarea que le esperaba. Justo en ese momento, un hermoso niño se le acercó y le preguntó la razón de su desaliento. Él le contó al niño su misión de revivir Vṛndāvana como lugar de peregrinación para los vaiṣṇavas y como sede del movimiento. Además, informó al niño sobre su misión de construir maravillosos templos para la adoración de Rādhā y Kṛṣṇa, y de establecer una comunidad erudita y literaria para la producción de una teología sistemática. (25)
Luego de oír la explicación de Śrī Rūpa, el niño hizo ademán de que lo siguiera, y lo condujo hasta una pequeña colina. “Adentro”, le dijo al Gosvāmī, “se encuentra la magnifica Deidad de Govindadeva, establecida casi cinco mil años atrás por Vrāja, el biznieto de Śrī Kṛṣṇa. Durante una de las invasiones musulmanas, los aldeanos enterraron la Deidad en esta colina para evitar su destrucción, pero posteriormente se perdió”.
“Todos los días”, continuó el muchacho, “pasa una vaca por este lugar y derrama su leche por toda la colina. De este modo, la leche se escurre, y Govindadeva saborea Su comida cotidiana”. Tras describir a Śrī Rūpa esta historia milagrosa, el niño desapareció. (26)
Un tanto escéptico, Rūpa fue a la mañana siguiente al mismo lugar, sólo para ver si efectivamente se presentaba una vaca y derramaba su leche por toda el área.
Para su sorpresa, de hecho apareció una vaca, y el suceso transcurrió tal y como se lo había contado el niño. Excitado, Rūpa llamó a varios aldeanos de la localidad para que excavaran ese sitio, pues ahora estaba convencido de que la Deidad de Govindadeva estaba enterrada allí.
Finalmente, después de grandes esfuerzos, encontraron a la Deidad y, dirigidos por Rūpa Gosvāmī, se entusiasmaron por erigir un templo y comenzar la apropiada adoración. Los habitantes de Vṛndāvana se sentían agradecidos de que Rūpa Gosvāmī hubiera iniciado esta búsqueda de Govindadeva, y muy pronto se convirtieron en sus leales seguidores. Rūpa envió entonces noticia a Purī de que su misión en Vṛndāvana estaba en marcha, y, tras oír esto, Śrī Caitanya envió jubiloso a Kasishwar Paṇḍit y a otros para que lo ayudaran.
Con el patrocinio del famoso emperador Akbar, pronto se construyó un templo, aunque no fue terminado hasta 1590 (según reza la inscripción del templo) o tal vez hasta 1593, (27) algunos años después de que Rūpa Gosvāmī dejara este mundo. La construcción de este templo, sin embargo, marcó un gran éxito para la misión de Rūpa Gosvāmī, quien incluso convenció al poderoso mahārāja Man Singh de Amber (Jaipur) de que donara enormes cantidades de piedra arenisca roja (28) y de que eventualmente se convirtiera en su discípulo (aunque algunos dicen que fue discípulo de Raghunātha Bhaṭṭa Gosvāmī, pero aun acerca de esto hay controversia). Los devotos y sus templos florecieron durante los muchos años de construcción del templo de Govindadeva.
Mucho después, a comienzos del siglo XVlll, durante una invasión musulmana acaudillada por el tirano Aurangzeb, el templo fue destruido y la Deidad, para Su protección fue trasladada a Jaipur, donde es adorada actualmente. Del templo original de siete pisos de Govindadeva, los pisos superiores fueron completamente arrasados. Sólo el enorme y cruciforme mahamandap permanece intacto. Este monumento, sin embargo, tiene una elevación que equivale a varios pisos, y contiene galerías abiertas y una cúpula abovedada compuesta de arcos apuntados que se intersectan. (29) En diseño, el templo de Govindadeva, con sus acentuados ángulos y vanos, ha sido aclamado como una innovación en el campo de la arquitectura.
Historiadores y expertos en desarrollo arquitectónico lo han descrito como “el edificio más interesante y elegante que la India clásica haya jamás producido, al menos en la Alta India, y tal vez el único del que un arquitecto europeo podría aprovechar unas cuantas sugerencias”. (30)
Si el templo de Śrī Rūpa fue testimonio visible de su dedicación y devoción, sus actividades literarias lo fueron aun más. El Caitanya-caritāmṛta anota específicamente que Śrī Caitanya apoderó al Gosvāmī para este enorme trabajo. (31) En consecuencia, él compiló muchos volúmenes inmensos, dieciséis de los cuales sé consideran sumamente importantes. ¡En total, escribió más de 100.000 versos! (32) Las obras más famosas incluyen el Vidagdha-mādhava, el Lalitā mādhava, el Bhakti-rasāmṛta-sindhu, el Ujjvala-nīlamaṇi, el Upadeśāmṛta, el Dāna-keli-kaumudī, y el Laghu-bhāgavatāmṛta. A continuación se describen varias de estas obras:
Tal como se ha declarado anteriormente, sus dos dramas, el Vidagdha-mādhava y el Lalitā-mādhava, describen los pasatiempos de Kṛṣṇa en Vṛndāvana y en Dvārakā, respectivamente.
Las pautas íntimas y los rasas místicos para estos dramas los divulgó el propio Śrī Caitanya cuando, en la casa de Candraśekhara Ācārya, actuó en representaciones dramáticas para el placer de los devotos. (33) Estos dramas han sido detallados por los biógrafos autorizados de Śrī Caitanya y sirvieron de inspiración a Rūpa Gosvāmī al escribir sus propios dramas.
El Vidagdha-mādhava describe los pasatiempos íntimos de Rādhā y Kṛṣṇa. Pūrṇamasi ayuda a la Divina Pareja en Sus encuentros, quien actúa de principio a fin como una dedicada sirvienta. El tema principal de la obra se centra en una preocupación fundamental de que el esposo de Rādhārāṇī pudiese alejarla de Kṛṣṇa, creando con ello un serio obstáculo para la unión de ambos. Por añadidura, Candrāvalī trata de competir con Rādhārāṇī por el afecto de Kṛṣṇa. El drama permite experimentar la turbulencia íntima de un rasa conyugal que es, por lo demás, bienaventurado. No obstante, tranquiliza a su audiencia sobre la victoria última que es enteramente inevitable en las relaciones espirituales. La obra transcurre en siete actos. (34)
El Lalitā-mādhava ha sido brevemente resumido por Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda:
“El Lalitā-mādhava es una descripción de los pasatiempos de Kṛṣṇa en Dvārakā. Estos pasatiempos fueron convertidos en un drama, y la obra se terminó en el año 1459 Sakabda [1546 d.C.]. La primera parte versa sobre las festividades al anochecer, la segunda sobre la matanza del Śaṅkhacūḍa, la tercera sobre la enloquecida Śrīmati Rādhārāṇī, la cuarta sobre el proceder de Rādhārāṇī hacia Kṛṣṇa, la quinta sobre el logro de Candrāvalī, la sexta sobre el logro de Lalitā, la séptima sobre el encuentro en Nava-Vṛndāvana, la octava sobre el disfrute en Nava-Vṛndāvana, la novena sobre la observación de estampas y la décima sobre la completa satisfacción de la mente. De este modo, el drama entero se divide en diez partes. (35)
A propósito de estos dos dramas, el Caitanya-caritāmṛta: “Śrīla Rūpa Gosvāmī compuso dos importantes dramas titulados el Vidaghada-mādhava y el Lalitā-mādhava, a partir de los cuales pueden comprenderse todas la melosidades derivadas de los pasatiempos del Señor Kṛṣṇa”. (36) Esto puede parecer pretencioso, pero, desde el tiempo de los Seis Gosvāmīs hasta nuestros días, los gauḍīyā vaiṣṇavas aceptan implícitamente esa conclusión.
Tal vez aun más importantes que estos dos dramas, sin embargo, son El Bhakti-rasāmṛta-sindhu de Rūpa Gosvāmī y su Ujjvala-nīlamaṇi. Acerca de éstos, el Caitanya-caritāmṛta declara: “Śrīla Rūpa Gosvāmī escribió muchos libros, de los cuales el más famoso es el Bhakti-rasāmṛta-sindhu. Con base en ese libro, se puede comprender la esencia del servicio. Śrīla Rūpa Gosvāmī compuso asimismo un libro titulado el Ujjvala-nīlamaṇi, a partir del cual se pueden comprender, hasta los máximos límites, las aventuras amorosas de Śrī Rādhā y Kṛṣṇa”. (37) Es en estos libros donde desarrolla él sus bhakti-rasa-śāstra para beneficio de toda la humanidad.
Al comparar éstos dos últimas obras con los dos dramas, David Haberman dice:
Cuando llegamos a la teoría de los rasas de Rūpa Gosvāmī... nos encontramos en un contexto por entero diferente. Para Rūpa, hay un solo drama capaz de producir verdadero rasa: La divina actuación de Kṛṣṇa. Cuando el análisis se orienta hacia un solo drama, del cual se sostiene que es la Realidad Última en sí, resultan cambios significativos. El énfasis, para Rūpa, no está en la capacidad del drama genérico de elevarnos por encima de la experiencia cotidiana; antes bien, él está profundamente interesado en los medios por los cuales uno puede participar en el único Drama Verdadero. Para el gauḍīyā vaiṣṇava, la salvación viene a definirse como una participación eterna en este drama absoluto. (38)
El Bhakti-rasāmṛta-sindhu es, de hecho, un análisis científico de cómo participar en el drama eterno de la vida espiritual. En él, Rūpa Gosvāmī define claramente el gradual desarrollo del bhakti-rasa, desde la etapa más práctica, la del vaidhī-bhakti-sādhana (seguir las reglas y regulaciones básicas) hasta el rāgānugā-bhakti-sādhana, en el cual uno aprende a seguir los pasos de los habitantes del mundo espiritual (con el expreso propósito de lograr acceso a él). Esto es otra vez esmeradamente articulado por Haberman:
Para experimentar bhakti-rasa, el bhakta [“el devoto”] se traslada a la escena del drama que transforma al mundo. En el sistema religioso de Rūpa, Kṛṣṇa deviene la pareja dramática del bhakta; Él es el héroe (nāyaka) del drama último. El bhakta individual se relaciona personalmente con Él, reprsentado dramáticamente un papel en esa obra. El mundo entero, o al menos toda Vrāja (la cual, desde la perspectiva espiritual correcta, viene a significar lo mismo) deviene un escenario en el cual actuar el propio papel; de este modo, la religión se convierte en drama, y actuar se vuelve un camino de salvación. Rūpa necesitaba una teoría dramática para describir su sistema religioso, y una teoría así estaba ya disponible. Utilizando los componentes de la teoría Bhārata de los rasas, Rūpa pudo expresar su interpretación de bhakti con un agregado sofisticado. (39)
Todo esto es bastante cierto, pero aquí debe señalarse que, así como la teoría de los rasas no se originó con Śrī Rūpa, tampoco se originó con Bhārata Muni. Su origen no está, como algunos pretenden que creamos, constreñido a una teoría estética o a un lenguaje dramático. El concepto de rasa es eterno, como lo es cualquier aspecto de la Verdad Absoluta, y se lo puede encontrar en las secciones más antiguas de la literatura védica.
El Taittirīya Upaniṣad (ll. 7), por ejemplo, declara enfáticamente: Raso vai saḥa, lo que demuestra que la relación trascendental (rasa) ha sido siempre parte integral de la comprensión espiritual. Los mejores eruditos modernos aseveran que la teoría de los rasas no comenzó en el Nāṭya-śāstra de Bhārata, y que nunca estuvo “específicamente restringida a la experiencia estética. Posee matices espirituales, metafisicos y metafóricos”. (40)
Gradualmente, Bhārata Muni incorporó estas ideas en su Nāṭya-śāstra y, éste sí fue utilizado por Rūpa Gosvāmī, al menos en términos de terminología básica. Así como Bhārata Muni describe doce rasas -cinco principales y siete secundarios-, así también lo hace Rūpa Gosvāmī. (41) Pero sólo hasta aquí llega la comparación. El Gosvāmī desarrolla esto en una complicada ciencia espiritual, y ello queda reflejado en su Bhakti-rasāmṛta-sindhu. En la actualidad no hay ninguna buena edición inglesa de esta obra, pero El Néctar de la Devoción de Su Divina Gracia A. C Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda constituye un excelente estudio sumario.
Sin embargo, el Ujjvala-nīlamaṇi retoma el tema allí donde lo dejó el Bhakti-rasāmṛta-sindhu. Su Divina Gracia A. C Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda resume el contenido de este clásico espiritual:
Hay también un libro titulado el Ujjvala-nīlamaṇi, un relato transcendental de relaciones amorosas que comprende metáforas, analogías y elevados sentimientos de bhakti. En el Bhakti-rasāmṛta-sindhu se describe brevemente el servicio devocional en amor conyugal, pero en el Ujjavala-nīlamaṇi se lo describe muy elaboradamente. Este libro describe diferentes tipos de amantes, sus asistentes y aquellas que le son muy queridas a Kṛṣṇa. También hay una descripción de Śrīmati Rādhārāṇī y de otras amantes, así como otras que le son muy queridas a Kṛṣṇa, están todas descritas. El libro relata asimismo cómo se despierta el amor por Kṛṣṇa y describe la situación extática, la situación devocional, el éxtasis permanente, el éxtasis perturbado, el éxtasis constante, las diferentes posiciones de diferentes vestidos, los sentimientos de separación, la atracción previa, la ira en la atracción, las variedades de relaciones amorosas, la separación del amado, el encuentro con el amado y el disfrute, directo e indirecto, entre la amante y el amado. Todo esto se ha descrito muy elaboradamente. (42)
En ésta, su obra más desarrollada, Rūpa Gosvāmī describe claramente los diversos niveles de amor divino. Mādhurya-rati, el amor por Dios, puede de hecho manifestarse en cualquiera de los cinco rasas, pero se desarrolla en especial en el rasa conyugal. En consecuencia, es esta relación en particular la que constituye el foco del Ujjavala-nīlamaṇi. Brevemente, los diversos niveles de amor divino se describen como sigue: Después de los rigores del vaidhī-bhakti-sādhana y del rāgānugā-bhakti-sādhana, el corazón se da al Señor Supremo con devoción plena, y uno queda establecido en su relación eterna con Él. Esto es prema, que más claramente se define como el maduro vínculo de emociones amorosas (bhāva-bandana) entre el hombre y Dios.
Experimentado en diversas etapas, prema puede ser plenamente desarrollado (prauḍha), medianamente (madhya), o levemente (manda). Cada nivel conduce al siguiente y culmina en sneha, que se refiere a un total derretirse del corazón. Así como uno produce mantequilla clarificada (ghī) hirviendo todas las impurezas, sneha es el nivel en el que el corazón se derrite como mantequilla a causa del intenso afecto por Kṛṣṇa.
A continuación viene mana, o el nivel extremadamente avanzado en el que puede que se experimente realmente un sentimiento de indignación proveniente del afecto insatisfecho. Esto es un “truco de amor” que Kṛṣṇa les juega a Sus devotos, acrecentando invariablemente el apego de ellos por Él.
Esto conduce a praṇaya, una intimidad amorosa en la que uno quiere tener a Kṛṣṇa como su exclusivo confidente. En este nivel es claramente visible una exclusiva devoción amorosa por Kṛṣṇa, la cual puede conducir a la plataforma más elevada de éxtasis.
Desde aquí, uno llega gradualmente a rāga, o “total apego”, y de ahí a anurāga, o “apego más refinado”. Esto, luego, conduce a bhāva, o “éxtasis total”. Por encima de este nivel está mahābhāva, pero esta posición espiritual es principalmente experimentada por Rādhārāṇī y el círculo íntimo de gopīs. Esta posición es de amor ilimitado y, por lo general está fuera del alcance de un alma limitada. De este modo, el Ujjavala-nīlamaṇi describe de principio a fin la ciencia de los rasas y los niveles sucesivos de amor divino. (43)
La penetración de Rūpa Gosvāmī dentro de los niveles más profundos de la conciencia de Kṛṣṇa no deben sorprendernos, ya que, además de recibir la instrucción de Caitanya Mahāprabhu, y de ser apoderado por Él para escribir literatura trascendental, la identidad espiritual de Rūpa Gosvāmī revela su extraordinaria posición trascendental. Él es una encarnación de Rūpa-mañjarī, una de las asistentas más íntimas de los asuntos amorosos entre Rādhā y Kṛṣṇa. (44)
“Por ofrecerle nueces de betel, por masajear Sus pies, por traerle agua, por arreglar Sus encuentros secretos con el Señor Kṛṣṇa, y por desempeñar muchos otros servicios, muchas doncellas gopīs complacen afectuosamente a Śrī Rādhā, la reina del bosque de Vṛndāvana. Cuando la divina pareja disfruta de Sus pasatiempos, estas doncellas no se muestran tímidas en absoluto, ni siquiera en presencia de las grandes gopīs para quienes Śrī Rādhā es más querida que la vida misma. Yo me refugio en estas doncellas gopīs, que tienen por líder a Śrīmati Rūpa-mañjarī”. (Vrāja-vilāsa-stava 38)


Notas

1. Que Kūrmadeva tenía cinco hijos fue ilustrado en una tabla genealógica por Śrī Haridāsa Dās: el Śrī Śrī Gauḍīyā Vaiṣṇava Abhidhan (Navadvīpa, Haribol Kutir, 471 Caitanyabda), p. 1248. La historia de este abhidhan (o “diccionario) es interesante. Fue una obra iniciada originalmente por Śrīla Bhaktisiddhanta Sarasvatī Ṭhākura, una de las más grandes autoridades de los tiempos actuales sobre el gauḍīyā vaiṣṇavismo. Sin embargo, él nunca completó el proyecto. En lugar de ello, dio su obra a un joven erudito de nombre Haridāsa Dās, quien, finalmente, completó y publicó el abhidhan.
La hermana de Rūpa Gosvāmī es mencionada en el Caitanya-caritāmṛta (op. cit., Madhya-līlā 8, Cap. 20, texto 38, p. l9).

2. Amara y Santosh son nombres que se atribuyen a veces a Rūpa y Sanātana antes de su iniciación por Śrī Caitanya. Existe alguna evidencia en apoyo de esto (véase S. K. De, Early History of the Vaiṣṇava Faith and Movement in Bengal Historia temprana de la fe y el movimiento vaiṣṇava en Bengala), op. cit., p. 147). Pero ello no parece estar basado en fuentes autoritativas anteriores.
Una vez más, cabe mencionar que Jana cree que “Rūpa” y “Sanātana” son los nombres originales de Rūpa y Sanātana Gosvāmī. Pero la evidencia citada evidencia del Caitanya-caritāmṛta respecto a esto basta para silenciar a Jana.
Además, en la iniciación es imprescindible cambiar el nombre del discípulo. Śrī Caitanya definitivamente lo habría hecho cuando inició a Rūpa y Sanātana. En consecuencia, éstos no pueden haber sido sus nombres originales.

3. La Dinastía Hussein Shahita deriva su nombre de Alauddin Hussein Shah, gobernante de Bengala de 1494 a 1519 [véase Ainslie T. Embree, Encyclopedia of Asian History, Vol. 2 (New York, Charles Scribner's Sons, l988), p. 88.]

El sultán Barbak Shah reinó anteriormente, quizá de 1460 a 1470, y fue un monarca liberal. Se dice que dio cabida a una diversidad de creencias religiosas, muy a la manera en que lo haría Akbar años después. En el Śrī Śrī gauḍīyā Vaiṣṇava Abhidhan (op. cit., p. 1397) se sugiere asimismo que el abuelo de Rūpa Gosvāmī, Mukunda Miśra, fue un poderoso líder en su régimen.
Pronto, sin embargo, el hijo del sultán Barbak, Shams-ud-din Yussuf Shah (1476-81), llegó al poder. A continuación, el hijo de Yussuf, Sikandar Shah, ascendió al trono. A diferencia del calificado Barbak Shah que vino antes que ellos, estos dos hombres fueron líderes ineficientes a la vez que intolerantes. El insulto se sumó al daño cuando Jalal-ud-din Fath Shah. También conocido como Hussein Shah, ascendió a continuación al trono. Este era un tirano y se oponía a los principios religiosos. Ello está explicado en A. K. Majumdar, Caitanya: His life and Doctrine [Caitanya: Su vida y Su doctrina] (Bombay, Bharatiya Vidyā Bhavan, 1969), pp. 84-5
De acuerdo con el Navadvīpa Dhāma Māhātmya (manuscrito no publicado, trad. Banu Dās, p. 19) de Bhaktivinoda Ṭhākura, Hussein Shah es en realidad Jarāsandha, el de los pasatiempos de Kṛṣṇa, y es por tanto un asociado eterno del Señor. Para más información sobre este régimen político, véase Momtazur Rahman Taradfar, Hussein Shahi Bengalí: A Socio-Political Study [La Bengala de Hussein Shah: Estudio Socio-politico] (Dacca, Asiatic Society of Pakistan, 1965).

4. Bhakti-ratnākara, op. cit., First Wave, textos 581-85, p. 28. Véase también Jadunatha Sinja, Jīva Gosvāmī's Religión of Devotion and Love [La religión de Devoción y Amor de Jīva Gosvāmī] (Varanasi, Chowkhamba Vidyābawam, 1983).

5. Bhakti-ratnākara, Ibid.

6. Ibid.

7. Ibid.

8. Ibid.

9. Ibid.

10. Ibid.

11. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Adi-līlā 2, Cap. 10, texto 84, significado.

12. Bhakti-ratnākara, op. cit., First Wave, texto 598, p. 29.

13. D. C. Sen, The Vaiṣṇava Literature of Medieval Bengal [La literatura vaiṣṇava de la Bengala Medieval] (Calcuta, University of Calcuta, 1917), p. 29.

14. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Madhya-līlā 1, capítulo 1.

15. Ibid. Véase también Su Divina Gracia A. C Bhaktivedanta Svāmī Prabhupāda, The Golden Avatar. Teachings of Lord Caitanya [El avatār dorado: Las enseñanzas del Señor Caitanya] (Los Ángeles, Bhaktivedanta Book Trust, l974, reimpresión), pp. 22-41. Véase también Kundali Dās, “The Glories of Lord Caitanya, Part 12: Instructions to Rūpa Gosvāmī” [“Las glorias del Señor Caitanya, Parte 12: Las instrucciones a Rūpa Gosvāmī”], en Back to Godhead, 21, No. 1, enero 1986, pp. 33-4.

16. Ibid.

17. Ibid.

18. D. C. Sen, op. cit., p. 30.

19. Ibid.

20. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Antya-līlā 2, Cap. 4, texto 26, p. 13.

21. Ibid., texto 214, p. 103.

22. Charles R. Brooks, Hare Kishnas in India [Los Hare Kṛṣṇas en la India], op. cit., p. 49.

23. F. S. Growse, Mathurā: A District Memori [Memoria del distrito de Mathurā] (New Delhi, Asian Educational Services, l979, reimpresión), p. 61.

24. Dhruva Mahārāja Dās, Vṛndāvana Dhāma Ki Jail, op. cit., p. 26.

25. Ibid., p. 56.

26. Ibid. Algunas veces se dice que no fue un niño sino una joven quien se le acercó.
Otras veces se dice que todo le fue revelado en un sueño.

27. Public Divition of the Ministry of Information and Broadcasting, Temples of North India [Templos de la India Septentrional], Edición Revisadā (New Delhi, Government of India, l968), pp. 20-21.

28. Ibid.

29. Ibid.

30. Ibid.

31. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Madhya-līlā 1, Cap. 1, texto 73, p. 49.

32. Ibid., Antya-līlā 2, Cap. 4, texto 226, p. 109.

33. Svāmī B. H. Bon, “Drama”, en Indian Philosophy and Culture (U. P., India, Institute of Oriental Philosophy, Diciembre l966), Vol. 12, No. 4, p. 8.

34. Véase Donna Wulff, Drama as a Mode of Religious Realizacion: The Vidaghamadhava of Rūpa Gosvāmī [El drama como modalidad de realización religiosa: El Vidagdhāmadhava de Rūpa Gosvāmī] (Chico, Calif, Scholars Press, 1984).

35. Caitanya-caritāmṛta, op. cit., Madhya-līlā 1, Cap. 1, texto 41, significado.

36. Ibid., Antya-līlā 2, Cap. 4, pp. 108-9.

38. David L. Haberman, op. cit., pp. 35-6.

39. Ibid., p. 34.

40. K. Kṛṣṇamoorthy, “Caitanya Bhakti-Rasa in Sanskrit” [“El Bhakti-rasa de Caitanya en sánscrito”] en V. N. Miśra, ed., Follow the Notes of the Flute (New Dehli, Sahitya Akademi, l987), p. 104.

41. Los siete rasas secundarios son: Ira, asombro, comedia, caballerosidad, misericordia, temor y espanto.

42. Para detalles véase S. K. De, “The Bhakti-Rasa-Sastra of Bengal Vaisnavism

[“El Bhakti-rasa-śāstra del vaiṣṇavismo bengalí”] en The Indian Historical Quarterly, Vol. 8, No. 4. Diciembre 1932, p. 682.