El desarrollo gradual de las actividades educativas debe estimarse del
modo siguiente: brahma-vidyā, el
conocimiento del alma espiritual, es superior al conocimiento del mundo físico;
el conocimiento sobre la Personalidad de Dios es superior al conocimiento del
Brahman impersonal o el espíritu; y el conocimiento de Śrī Kṛṣṇa y de Sus
pasatiempos es superior al conocimiento de la Personalidad de Dios Viṣṇu.
En el Śrīmad-Bhāgavatam se dice
que el trabajo más elevado es aquel que satisface los sentidos de Hari y la
educación más excelsa es la que imparte conocimiento sobre Él. Aquel que ha
aprendido los nueve diferentes procesos de servicio devocional —oír, cantar,
recordar, servir los pies de loto, adorar, orar, ser un sirviente, abrazar al
Señor con amistad, y entregarse por completo a Él— debe considerarse la persona
más docta.