Bhagavad-gītā 7.10
La sabiduría del Gītā nos asegura que Kṛṣṇa responde a cada oración de cada alma.
El problema es que esperamos, incluso exigimos, que resuelva el problema de la manera específica que queremos. Esta actitud es un síntoma de nuestra confianza a medias en Kṛṣṇa - nuestra confianza en Su omnipotencia, pero no en Su omnisciencia. Dicho sin rodeos, creemos que Kṛṣṇa es lo suficientemente fuerte como para resolver nuestro problema pero no lo suficientemente inteligente. Entonces, le decimos la solución específica y esperamos que use Su omnipotencia para implementarla por nosotros. Y cuando no se implementa, empezamos a dudar de Él.
¿No es mejor dudar de nuestra suposición de que Kṛṣṇa necesita nuestra inteligencia?
Un hecho espiritual fundamental es que Kṛṣṇa es mucho más inteligente que nosotros; es el más inteligente de todos los seres vivos. De hecho, el Bhagavad-gītā (7.10) afirma que Él es la fuente de la inteligencia de todos – incluida la nuestra. No sólo es omnipotente, también es omnisciente.
Todos podemos elegir confiar en Kṛṣṇa plenamente en lugar de parcialmente. Cuando confiamos plenamente en Él, no le impondremos nuestra inteligencia exigiéndole una solución específica. En cambio, le pediremos fuerza y sabiduría - fuerza para seguir sirviéndole incluso en medio del problema, y sabiduría para comprender y cooperar con Su solución, cualquiera que sea y cuando aparezca.
Confiar plenamente en Kṛṣṇa nos dará dos grandes beneficios. En primer lugar, no importa los problemas que surjan, podremos mantenernos seguros centrándonos en cómo servirle mejor en esa situación. En segundo lugar, periódicamente nos sorprenderemos de cómo aborda esos problemas de maneras mucho mejores de lo que podríamos haber pensado.
¡Oh, hijo de Pṛthā!, sabed que Yo soy la semilla original de todo lo que existe, la inteligencia de los inteligentes y el poder de todos los hombres poderosos. – Bhagavad-gītā 7.10
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