Comprender el yo reflexivo y el yo impulsivo


Bhagavad-gītā 3.43

Empodérate , Nútrete
A menudo experimentamos un tira y afloja interno entre voces opuestas. Para comprender mejor estas fuerzas, consideremos la dinámica de nuestro mundo interior, como se describe en el Bhagavad-gītā (3.42) - coloca los sentidos, la mente, la inteligencia y el alma en una jerarquía ascendente.
El siguiente verso del Gītā (3.43) nos insta a usar nuestra inteligencia para arraigarnos espiritualmente y así regular nuestros impulsos inferiores. Para entender mejor este verso, consideremos dos sentidos del yo: reflexivo e impulsivo. Como el alma y la inteligencia juntas están destinadas a regular, nos referiremos a ellas colectivamente como el yo reflexivo. Como los deseos miopes que deben regularse están presentes principalmente en la mente y los sentidos, nos referiremos a estos dos colectivamente como el yo impulsivo. Expresado con esta terminología, el Gītā nos insta a utilizar el yo reflexivo para regular el yo impulsivo.
Una forma de hacerlo es recordar los momentos en que actuamos tontamente. Al hacer esa retrospección, utilizamos nuestro yo reflexivo para captar nuestro yo impulsivo en acción. Si analizamos varios de los momentos en los que el yo impulsivo nos impulsó a hacer algo imprudente, podremos identificar las situaciones típicas en las que el yo impulsivo nos abruma. Equipados con este conocimiento, podemos estar en guardia cuando volvamos a encontrarnos con esas situaciones.
Nuestro yo reflexivo es como un músculo - se debilita si se usa con poca frecuencia y se fortalece si se usa con regularidad. Por lo tanto, cuanto más utilicemos el yo reflexivo para captar al yo impulsivo en acción en el pasado, más fuerte se volverá. Con el tiempo, comenzará a detectar el yo impulsivo en acción también en el presente, protegiéndonos así de actuar de manera autodestructiva.
Conclusión
Cuanto más ejercitemos nuestro yo reflexivo, más podremos regular nuestro yo impulsivo.
Piénsalo:
· ¿Qué es el yo reflexivo y el yo impulsivo?
· Piense en tres incidentes pasados ​​en los que pudo captar al yo impulsivo en acción.
· ¿Cómo puedes ejercitar tu yo reflexivo con regularidad?
En consecuencia, sabiendo que uno es trascendental a los sentidos, la mente y la inteligencia materiales, ¡oh, Arjuna, el de los poderosos brazos!, se debe estabilizar la mente mediante una inteligencia espiritual deliberada [el proceso de conciencia de Kṛṣṇa], y así, mediante la fuerza espiritual, conquistar a ese insaciable enemigo conocido como la lujuria. - Bhagavad-gītā 3.43

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