Fijar la mente en Kṛṣṇa es la palanca para fijar la mente

Bhagavad-gītā 8.14

Cuando algo no funciona bien, tenemos que arreglarlo. Todos necesitamos arreglar nuestra mente, porque con frecuencia funciona mal porque se distrae. Se preocupa por lo inmutable, anhela lo indeseable y se preocupa por lo impredecible. Con sus fijaciones innecesarias y malsanas, sabotea nuestra capacidad de afrontar los desafíos de la vida.

Sin embargo, fijar la mente en cosas constructivas, en las cosas que tenemos que hacer, no es fácil. Arrastrarla desde sus fijaciones puede parecer como arrastrar un peso enorme. Con el tiempo, el trabajo se vuelve demasiado y nos damos por vencidos. Y la mente rápidamente regresa a sus obsesiones angustiosas.

Así como podemos levantar un peso pesado con mayor facilidad con una palanca, podemos levantar la mente, que está cargada de encaprichamientos, con mayor facilidad con la palanca del recuerdo de Kṛṣṇa. Aunque sus fijaciones puedan ser variadas, las necesidades esenciales de la mente son dos: seguridad y placer. Si algo la amenaza, se vuelve temerosa. Si algo la atrae, se vuelve deseante.

Kṛṣṇa, siendo la realidad última, es la fuente de la seguridad suprema y la satisfacción suprema. Cuando fijamos la mente en Él, primero se opone, a veces con vehemencia. ¿Por qué? Porque está acostumbrada a buscar seguridad y satisfacción en otra parte. Pero si perseveramos en centrarnos en Él mediante la práctica del bhakti-yoga, experimentamos que la seguridad y la alegría que provienen de este enfoque divino no tienen paralelo. A medida que esta comprensión se va arraigando, la mente abandona lentamente sus apegos a las cosas mundanas y traslada ese apego a Kṛṣṇa. Una mente con apego divino se centra más fácilmente en las cosas constructivas, lo que hace que la vida sea más manejable.

No es extraño que el mismo Bhagavad-gītā que reconoce la obstinación de la mente (6.35) asegure que fijarla en Kṛṣṇa hace mucho más fácil nuestro crecimiento interior (8.14). De este modo, fijar la mente en Kṛṣṇa actúa como la palanca para fijar la mente.

Para aquel que siempre Me recuerda sin desviación, Yo soy fácil de obtener, ¡oh, hijo de Pṛthā!, debido a su constante ocupación en el servicio devocional. – Bhagavad-gītā 8.14