Para Dios, ningún problema es demasiado grande o demasiado pequeño


Bhagavad-gītā 8.9

Cuando nos enfrentamos a grandes problemas que no podemos resolver por nosotros mismos, buscamos ayuda de alguien más grande que nosotros.
Si somos religiosos, sentimos que la persona más importante es Dios. El Bhagavad-gītā (7.16) indica que quienes buscan soluciones a sus problemas (como los afligidos y los necesitados económicos) acuden a Kṛṣṇa en busca de ayuda.
La sabiduría del Bhagavad-gītā explica la grandeza de Kṛṣṇa filosóficamente y luego la demuestra visualmente a través de la revelación de la forma universal. Y afirma que somos Sus partes eternas (15.07), destinadas a servirle amorosamente. Cuando apreciamos así la grandeza de Kṛṣṇa, no nos dejamos abrumar por los grandes problemas, sino que continuamos esforzándonos por servirle diligentemente.
El Bhagavad-gītā (8.9) señala Su grandeza (es el sustentador de todo) y Su pequeñez (es más pequeño que lo más pequeño). Contemplar Su suprema pequeñez puede ayudarnos a afrontar los problemas pequeños.
Las pequeñas cosas que salen mal, una tras otra, pueden causarnos grandes problemas. Los árboles altos que sobreviven a tormentas severas a veces son derribados por termitas diminutas. De manera similar, las pequeñas cosas pueden volvernos irritables, insociables y poco espirituales.
En esos momentos, podemos pensar que nuestro problema es demasiado pequeño como para llevarlo a Kṛṣṇa. Si bien eso puede ser cierto, la verdad más grande es que cualquier cosa que nos desconecte de Él es un problema importante, porque esa desconexión es el mayor problema. Además, en Su pequeña forma como la Superalma que mora en nosotros, Él está presente dentro de nosotros y puede percibir incluso nuestros problemas más pequeños.
En lugar de preocuparnos por el tamaño del problema, podemos centrarnos en la fuerza de nuestro propósito y orar a Kṛṣṇa para que nos dé la fuerza para servirle siempre, en medio de problemas grandes, problemas pequeños o ningún problema.
Cuando así nos mantenemos fijos en servirle, esa conexión nos da la calma y la claridad para afrontar todas las situaciones con sabiduría.
Piénsalo:
· ¿Cómo puede la conciencia de Kṛṣṇa ayudarnos a enfrentar grandes problemas?
· ¿Cómo pueden los pequeños problemas perturbarnos gravemente?
· ¿Cuál es el problema con pensar que algunos problemas son demasiado pequeños para llevárselos a Kṛṣṇa?
Se debe meditar en la Persona Suprema como aquel que lo sabe todo, que es el más antiguo de todos, que es el controlador, que es más pequeño que lo más pequeño, que es el sustentador de todo, que está más allá de toda concepción material, que es inconcebible y que siempre es una persona. Él es luminoso como el Sol, y es trascendental, más allá de esta naturaleza material. – Bhagavad-gītā 8.9

No hay comentarios:

Publicar un comentario