El karma no es como una misteriosa enfermedad contagiosa: es lógico, no diabólico

Bhagavad-gītā 4.17

Comprensión de los conceptos del Gītā

Cuando entendemos el principio del karma –de cómo somos responsables de nuestras acciones– nos volvemos cautelosos para evitar acciones incorrectas y elegir acciones correctas. Sin embargo, tal precaución puede tener consecuencias no deseadas.

Podemos empezar a tratar a las personas que hacen mal karma como intocables, temiendo que el contacto con ellos nos infecte con su karma.

Sin embargo, el karma no es un contagio misterioso que pueda infectarse por contacto accidental. Después de todo, el karma no es diabólico y no causa miseria sin motivo alguno. Es lógico y nos da las debidas consecuencias de nuestras elecciones. Más allá de este principio central de responsabilidad, el funcionamiento del karma puede resultar incomprensible (Bhagavad-gītā 4.17). Es imposible correlacionar nuestras innumerables elecciones pasadas con nuestras variadas situaciones presentes.

En lugar de volvernos paranoicos con el karma, podemos centrarnos en el propósito esencial de la responsabilidad kármica: animarnos a hacer lo correcto, promoviendo así nuestra evolución espiritual hacia la realidad última, Kṛṣṇa. Y una parte integral de hacer lo correcto es tratar a todos con la dignidad que les corresponde como seres humanos y como partes de Kṛṣṇa. Esa empatía aumenta a medida que evolucionamos espiritualmente. Aquellos que ven a Kṛṣṇa en todas partes (6.30) también ven a todos por igual en su placer y dolor (6.32).

¿Cómo se aplica la empatía con respecto a quienes hacen mal karma? Así como nos sentiremos alienados si alguien nos mira con desprecio porque estamos haciendo algo que ni siquiera sabemos que está mal, otros también se sentirán alienados. Si nuestra conciencia del karma nos hace parecer pomposos bienhechores, alejando así a otros de la sabiduría espiritual que presentamos y representamos, terminaremos haciendo algo incorrecto, en nombre del karma.

Cuando nos enfocamos en ser conscientes de Kṛṣṇa, no conscientes del karma, hacemos lo correcto, de una manera que atrae a otros a hacer lo correcto.

Piénsalo:

· ¿Cómo puede la conciencia del karma tener consecuencias no deseadas?

· ¿Por qué una actitud crítica que surge del karma está mal informada?

· Al tratar con quienes hacen mal karma, ¿cómo podemos ser empáticos?

Las complejidades de la acción son muy difíciles de entender. Por consiguiente, uno debe saber bien lo que es la acción, lo que es la acción prohibida y lo que es la inacción. – Bhagavad-gītā 4.17