Bhagavad-gītā 6.8
Como vivimos en una era centrada en la información, a menudo nos estimula la nueva información. Cuando encontramos el Bhagavad-gītā, tendemos a buscar estímulo en nueva información espiritual. Si dejamos que esta búsqueda de nueva información se convierta en una obsesión, acabaremos sabiendo mucho, pero experimentando poco - la realización espiritual se nos escapará.
¿Por qué?
Porque la realización espiritual proviene del amor, no del conocimiento.
La sabiduría del Gītā explica que todos somos seres espirituales conscientes cuya necesidad más profunda es el amor. Para disfrutar de la felicidad real y eterna, necesitamos amar al todo atractivo y todo amoroso Señor de nuestro corazón, Kṛṣṇa. Para amarlo, necesitamos conocerlo. Entonces, la sabiduría del Gītāproporciona abundante información espiritual sobre Él.
Sin embargo, el objetivo del camino espiritual no es la información sino la devoción. La información es útil en la medida en que sirve como medio para alcanzar el fin de la devoción. Si la información por sí sola se convierte en nuestro fin, no nos conectaremos devocionalmente con Kṛṣṇa y, por lo tanto, no experimentaremos una profunda felicidad espiritual. Como nuestra búsqueda de placeres es innata, los deseos de placeres materiales seguirán atormentándonos. En el mejor de los casos, nos quedaremos estancados en la plataforma intelectual donde podemos deleitarnos en mostrar nuestro conocimiento espiritual a los demás. En el peor de los casos, nuestra sed de placer nos arrastrará al nivel sensual o incluso al nivel pecaminoso.
Para elevarnos del nivel intelectual al nivel espiritual, debemos dejar que la información de las Escrituras nos impulse a la acción trascendental, al servicio práctico a Kṛṣṇa. El servicio expresa nuestra devoción si la tenemos y nuestro deseo de devoción si no la tenemos. Cuando vamos más allá de almacenar información y nos sumergimos en el flujo del servicio, nuestra información, por la misericordia de Kṛṣṇa, florecerá hasta convertirse en realización. Esta integración de información y realización, como afirma el Gītā ( 6.8 ), otorgará satisfacción espiritual.
Se dice que una persona está establecida en la comprensión del ser y se le da el nombre de yogī [o místico], cuando ella se encuentra plenamente satisfecha en virtud del conocimiento y la comprensión que ha adquirido. Esa persona está situada en la trascendencia y es autocontrolada. Ella ve todo igual, ya sean guijarros, piedras u oro. – Bhagavad-gītā 6.8
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