Bhagavad-gītā 5.10
Algunas personas piensan que volverse espirituales requiere abandonar la vida material.
Sin embargo, su aprensión surge de una mala comprensión de la espiritualidad. El texto espiritual fundamental, el Bhagavad-gītā, explica que volverse espiritual se centra en abandonar las concepciones materialistas, no en abandonar todo lo material.
Al comienzo del Gītā, Arjuna quería abandonar la vida material, porque temía que sus deberes materiales le causaran esclavitud kármica. En respuesta a su preocupación, el Gītā enfatiza que nunca podemos abandonar toda acción (5.3) y que sin actuar obedientemente, ni siquiera podemos mantener nuestros cuerpos (8.3).
Lo que causa el enredo no es la acción per se, sino su motivación subyacente. Nuestra motivación está determinada por nuestra concepción de la vida. Tener una concepción materialista de la vida significa vivir para los placeres materiales. Esta concepción es errónea porque somos almas, partes eternas de Kṛṣṇa (15.7) - estamos destinados a vivir en eterna armonía extática con Él.
Para evitar el enredo kármico, necesitamos cambiar nuestra motivación y trabajar con una actitud de sacrificio (9.3). Cuando ofrecemos nuestras actividades a la realidad espiritual, el karma no se pega a nosotros, así como el agua no se pega a una hoja de loto (5.10). Kṛṣṇa es la realidad espiritual suprema (7.7). Por lo tanto, el sacrificio para complacer a Kṛṣṇa es la forma más evolucionada de sacrificio.
Cuando trabajamos con una actitud de sacrificio devocional, no utilizamos nuestros recursos mundanos para nuestro placer material. En cambio, los usamos para el placer de Kṛṣṇa al ocuparlos en Su servicio como una ofrenda de nuestro amor.
Al ver la conexión de todo con Kṛṣṇa y utilizar todo a Su servicio, abandonamos la concepción materialista de la vida. Entonces podremos funcionar en la vida material sin enredarnos materialmente, porque nuestra motivación de trabajar para complacer a Kṛṣṇa sirve como nuestra protección.
A aquel que ejecuta su deber sin apego, entregándole los resultados al Señor Supremo, no lo afecta la acción pecaminosa, tal como a la hoja del loto no la toca el agua. – Bhagavad-gītā 5.10
No hay comentarios:
Publicar un comentario