El trabajo del corazón es un trabajo duro

Bhagavad-gītā 6.24

Generalmente pensamos en el trabajo duro en términos de trabajo físico y ocasionalmente en términos de trabajo intelectual.

Pero rara vez reconocemos que otro tipo de trabajo también puede ser duro: el trabajo del corazón, el trabajo de dirigir nuestro corazón hacia un objeto digno de nuestro amor.

La sabiduría del Gītā explica que el objeto más digno de ese tipo es Kṛṣṇa. ¿Por qué? Porque Él es la persona suprema y todo atractiva. Y estamos intrínsecamente relacionados con Él, porque somos almas, que somos sus partes eternas (Bhagavad-gītā 15.7). Cuando dirigimos nuestro corazón hacia Él, Él lo llena e inunda con Su infinito amor.

Desgraciadamente, sin embargo, actualmente nuestro corazón está mal dirigido hacia diversos objetos mundanos que, en el mejor de los casos, nos ofrecen una breve satisfacción, seguida de angustia. ¿Por qué desamor? Porque la temporalidad de todo lo material nos separa inevitablemente de ellos.

Es por eso que necesitamos redirigir nuestro amor hacia Kṛṣṇa, Quien es eternamente adorable y eternamente amoroso. Para redirigir nuestro amor, necesitamos practicar bhakti-yoga. Este proceso tradicional de transformación del corazón se centra en fijar nuestra mente en Kṛṣṇa.

Sin embargo, ese enfoque es un trabajo duro. ¿Por qué? Porque nuestra mente apegada a lo material corre con fuerza hacia los objetos mundanos. Restringirlo y redirigirlo hacia Kṛṣṇa requiere un esfuerzo constante y concienzudo. Tal esfuerzo nos pone en contacto con el supremo todo puro, purificándonos así y debilitando nuestros deseos mundanos.

Mientras nos purificamos, si nos distraemos, debemos mantenernos decididos sin desanimarnos (Bhagavad-gītā 6.24). ¿Cómo podemos mantenernos decididos? Anticipando la dificultad, sabiendo que el trabajo del corazón es un trabajo duro. Así como estamos decididos a sudar mucho cuando hacemos un trabajo físico duro, podemos estar decididos a sudar mucho cuando hacemos el trabajo del corazón al practicar bhakti-yoga.

Así como el trabajo físico duro fortalece nuestros músculos, el trabajo del corazón fortalecerá nuestra devoción y, en última instancia, nos hará absortos eterna y alegremente en Kṛṣṇa.

Piénsalo:

· ¿Por qué Kṛṣṇa es el objeto más digno de nuestro amor?

· ¿Por qué el trabajo del corazón es un trabajo duro?

· Mientras trabajamos el corazón, ¿cómo podemos evitar desanimarnos?

Uno debe dedicarse a la práctica del yoga con determinación y fe, y no dejarse apartar de la senda. Uno debe abandonar, sin excepción, todos los deseos materiales nacidos de especulaciones mentales, y de ese modo controlar con la mente todos los sentidos, por todas partes. – Bhagavad-gītā 6.24