Bhagavad-gītā 9.29
Algunas personas dicen: “El Bhagavad-gītā recomienda el bhakti como el camino del corazón y jñāna como el camino de la cabeza”.
Pero la sabiduría del Bhagavad-gītā no admite una segregación tan simplista; integra todas nuestras facultades en la búsqueda espiritual. Hacia su conclusión, el Bhagavad-gītā ( 18.63 ) nos llama a utilizar nuestra cabeza para deliberar sobre su mensaje. Luego ( 18.65 , 18.66 ) nos insta a ofrecer nuestro corazón a Kṛṣṇa en rendición devocional. A continuación ( 18.70 ) elogia a quienes utilizan su cabeza para estudiar su mensaje. Y luego ( 18.76 , 18.77 ), describe positivamente a quienes recuerdan con un corazón jubiloso su mensaje de intimidad y majestuosidad. De este modo, el Bhagavad-gītā integra tanto la cabeza como el corazón en su discurso de evolución espiritual progresiva.
Otra dicotomía entre cabeza y corazón es la noción de que la introspección es el dominio de la cabeza y el afecto, el dominio del corazón. Pero una vez más el Bhagavad-gītā derriba esos muros que intentan dividir nuestro ser en dominios dispares. El Bhagavad-gītā ( 10.8 ) indica que la introspección produce afecto: aquellos que comprenden la gloria de Kṛṣṇa con su cabeza, luego lo sirven de todo corazón. Y dos versos más adelante indica ( 10.10 ) que el afecto produce introspección: aquellos que sirven a Kṛṣṇa amorosamente reciben de Él la inteligencia para alcanzarlo.
La clave para entender la simbiosis del Bhagavad-gītā es verla como una celebración de la reciprocidad entre personas en el ámbito de la trascendencia. El Bhagavad-gītā ( 9.29 : mayi te teshu capy 'ham ) declara: “Yo vivo en mis devotos y mis devotos viven en mí”. Kṛṣṇa es una persona viva y amorosa que nos ama por lo que somos, Sus partes preciosas. Y nos ve como personas que expresamos nuestro deseo de amarlo utilizando en Su servicio lo que tenemos: la cabeza, el corazón o ambos. Al ver la sinceridad e intensidad de nuestro amor, Él nos corresponde ofreciéndonos vida eterna extática.
Yo no envidio a nadie, ni soy parcial con nadie. Yo tengo la misma disposición para con todos. Pero todo el que Me presta servicio con devoción es un amigo y está en Mí, y Yo también soy un amigo para él. - Bhagavad-gītā 9.29
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