Puede que estemos lejos de Kṛṣṇa, pero Kṛṣṇa siempre está cerca de nosotros

Bhagavad-gītā 6.30

La distancia entre dos personas en cualquier relación es una función no de la ubicación corporal sino de la disposición emocional. Los miembros de una familia que viven bajo el mismo techo pueden ser universos separados, mientras que los amigos que están separados por continentes pueden ser más cercanos que los miembros de la familia.

La disposición interior triunfa sobre la ubicación exterior como determinante de la cercanía de la relación en toda relación. Aún así, hay un giro adicional en este principio cuando se aplica a nuestra relación con Kṛṣṇa. Porque a diferencia de otras personas que son todas finitas, Él es infinito; siendo Supremo, es omnipresente. El Bhagavad-gītā ( 15.15 ) nos informa que Él está presente en nuestros propios corazones como la Superalma. Por eso, en términos de ubicación, siempre está cerca de nosotros. De hecho, Él está más cerca de nosotros que cualquier persona que nos abrace de cerca.

Pero esa no es la única forma en que está cerca de nosotros. Además, y mucho más importante, Él siempre está preocupado por nosotros, porque nos ama más que a nadie. El Gītā ( 5.29 ) afirma que Él es nuestro mayor bienqueriente.

Así, tanto en términos de ubicación literal como de disposición emocional, Kṛṣṇa siempre está cerca de nosotros.

Desafortunadamente, sin embargo, debido a que estamos apegados a las cosas mundanas en lugar de a Kṛṣṇa, nuestras emociones quedan fácil y repetidamente atrapadas en esas cosas. Debido a esta mala dirección emocional, podemos sentirnos lejos de Él.

No obstante, recordar Su amor y Su proximidad puede ayudarnos a frenar esos sentimientos y redirigir nuestros sentimientos hacia Kṛṣṇa a través de la práctica diligente del bhakti-yoga. Cuanto más dirijamos nuestras emociones de esta manera, más podremos ver incluso las cosas mundanas como manifestaciones de las energías de Kṛṣṇa y todo gradualmente comenzará a servir como estímulo para el recogimiento devocional, como asegura el Bhagavad-gītā( 6.30 ). Al vivir así en Su recuerdo y presencia, nos daremos cuenta y saborearemos cómo Kṛṣṇa siempre está cerca de nosotros – y nosotros también estamos siempre cerca de Él.

Aquel que Me ve en todas partes y que ve todo en Mí, Yo nunca lo pierdo a él, y él nunca Me pierde a Mí. – Bhagavad-gītā 6.30