Dios no es un ser que existe en el tiempo: es el ser por el cual existe el tiempo

Bhagavad-gītā 10.33

Algunas personas preguntan: “¿Cómo podemos saber que Dios todavía vive?”.

La idea de que Dios puede dejar de existir es como la idea de que un círculo puede dejar de ser circular - es una imposibilidad por definición. Un círculo, por definición, nunca puede dejar de ser circular. De manera similar, Dios nunca puede dejar de existir. Porque, por definición, Él es la existencia que es la base de toda existencia.

El Bhagavad-gītā (11.39) afirma que nada puede existir sin Dios. Él es la causa de todas las causas y el sustentador subyacente a todos los sustentadores. La posibilidad de que pueda dejar de existir no existe porque no es un ser que existe en el tiempo. Las cosas que existen dentro del dominio del tiempo surgen y dejan de existir. Pero el tiempo proviene de Él; Él no proviene del tiempo.

Y ¿qué sucede cuando Dios desciende en forma de encarnaciones? ¿Acaso no existe en el tiempo? Aunque se encarna en este mundo y parte de él en momentos específicos, existía antes de Su descenso y existe después de Su partida. Para transmitir la eternidad de Su existencia, los sabios del bhakti utilizan las palabras aparición y desaparición para referirse a Su manifestación y Su inmanifestación, tal como el Sol continúa existiendo antes de aparecer ante nuestra vista al amanecer y después de desaparecer de nuestra vista al atardecer.

En Su existencia eterna en Su morada personal, el mundo espiritual, Dios existe más allá del tiempo. Entre Sus muchas manifestaciones en este mundo, el Bhagavad-gītā (10.33) menciona el tiempo como una sola. El hecho de que el tiempo sea Su manifestación implica que la existencia del tiempo depende de Él; Su existencia no depende del tiempo.

Al asimilar así la definición de Dios, entendemos que Él nunca puede dejar de existir: la existencia misma de cualquier cosa, de hecho, la existencia misma de la existencia misma, apunta a Su existencia fundamental.

De las letras, Yo soy la A; y entre las palabras compuestas, Yo soy el compuesto dual. Yo soy, además, el tiempo inagotable, y de los creadores, Yo soy Brahmā. – Bhagavad-gītā 10.33