Bhagavad-gītā 11.55
Madurez emocional
Siempre que alguien nos hace daño, una tendencia humana natural es querer vengarse de esa persona: “De la misma manera que me has hecho daño, yo te haré daño a ti”. Si seguimos esa tendencia, nos dejamos consumir por el odio y las fantasías de venganza.
Esta obsesión nos lleva a un desacuerdo con nosotros mismos. Esto es válido tanto en sentido metafórico como literal. Metafóricamente, nuestro yo central se refiere a las cosas que son verdaderamente importantes para nosotros. Literalmente, somos almas que están en un viaje de evolución espiritual que abarca varias vidas. Cuando las fantasías de venganza nos consumen, olvidamos tanto las cosas que son verdaderamente importantes para nosotros como nuestra evolución espiritual. Por lo tanto, nos enfrentamos a nosotros mismos.
Al final, terminamos perdiéndonos en nuestro esfuerzo desesperado por hacer que alguien más pierda. Nos centramos en provocar la caída de la otra persona y en ese proceso no podemos tener a Kṛṣṇa como nuestro centro. No podemos alcanzar el amor por Dios si estamos llenos de odio por cualquier parte de Dios.
Cuando nos esforzamos por conectarnos internamente con Kṛṣṇa y contribuir externamente a servirlo de acuerdo con nuestra capacidad, tal vez tengamos que disciplinar a otros. Pero lo haremos sin volvernos hostiles, sin buscar vengarnos de ellos. Esa es la forma de vivir de manera piadosa. El Bhagavad-gītā (11.55) nos exhorta a no ser hostiles hacia nadie mientras cumplimos con nuestras obligaciones materiales y buscamos nuestra evolución espiritual.
En matemáticas, los números pares y los impares son categorías que no se superponen; los números pares no pueden ser impares y viceversa. Pero en la vida, vengarse de los demás y estar en desacuerdo son acciones que se superponen. Si comprendemos esto, podemos evitar ambas cosas y centrarnos en seguir adelante con nuestra evolución espiritual hacia Kṛṣṇa y una vida plena y significativa.
Piénsalo bien:
· ¿Cómo podemos llegar a estar en desacuerdo con nosotros mismos mientras tratamos de vengarnos de los demás?
· ¿Cómo podemos actuar contra aquellos que nos han hecho daño sin perdernos a nosotros mismos?
· ¿Necesitas dejar de vengarte de alguien? ¿Cómo puedes hacer para dejar de hacerlo tú mismo?
Mi querido Arjuna, aquel que se dedica a Mi servicio devocional puro, libre de la contaminación de las actividades fruitivas y de la especulación mental, y que trabaja para Mí, que Me convierte en la meta suprema de su vida y que es amigo de todo ser viviente, sin duda que viene a Mí. – Bhagavad-gītā 11.55
No hay comentarios:
Publicar un comentario