Los devotos que se quedaron sin nada están bien con Kṛṣṇa


Bhagavad-gītā 12.16

Algunas personas creen que la prosperidad material es un signo del agrado de Dios y la adversidad material, un signo de Su desagrado.

 

Estas creencias son típicas de la religiosidad materialista, un nivel preliminar para acercarse a Dios. La sabiduría del Bhagavad-gītā nos lleva mucho más arriba, al nivel del amor desinteresado por Kṛṣṇa. En ese nivel, los devotos se centran simplemente en Su placer, no en su estatus material.

 

Por supuesto, no tenemos que separar las cosas materiales de Kṛṣṇa, pues podemos usarlas en Su servicio. Pero como buscadores devotos, debemos ser conscientes de que esas cosas pueden distraernos de Él si nos engañan y nos hacen creer que por sí mismas pueden hacernos felices.

 

Así, si las circunstancias nos privan de esas cosas, podemos ver la situación no como una adversidad sino como una oportunidad para liberarnos de posibles distracciones y concentrarnos en Kṛṣṇa con una sola mente. Para corroborar esto, el Śrīmad-Bhāgavatam10.88.08 ) nos insta a ver esas pérdidas no como signos del desagrado o la ira de Kṛṣṇa, sino como expresiones de su favor especial. Adoptar esta visión puede inspirarnos a refugiarnos más en Kṛṣṇa. Entonces, incluso si nos quedamos sin nada, estaremos bien con Kṛṣṇa - durante la privación, sentiremos Su presencia más intensamente y nos acercaremos aún más a Él.

 

Sin embargo, no tenemos que buscar intencionalmente la pobreza material para acercarnos a Kṛṣṇa. Tampoco tenemos que asumir que la prosperidad material significa Sus bendiciones. Nuestra cercanía a Él depende principalmente de la constancia y seriedad de nuestra práctica del bhakti-yoga. El Bhagavad-gītā12.16 ) indica que aquellos que se mantienen firmes en su devoción, sin ansiar ( anapekshah ), esclavizarse ( sarvarambha-parityagi ) ni preocuparse ( gata-vyatha ) por las cosas materiales, son queridos por Kṛṣṇa.

 

Si aspiramos a vivir así, eventualmente viviremos con Kṛṣṇa en esta vida así como en la próxima.

 

Ese devoto Mío que no depende del curso ordinario de las actividades, que es puro, que es experto, que no tiene preocupaciones, que está libre de todos los sufrimientos y que no ansía obtener un resultado, es muy querido por Mí. - Bhagavad-gītā 12.16

No hay comentarios:

Publicar un comentario